NBA: una experiencia neoyorquina

El reñido juego fue seguido -además- por las redes sociales muy de cerca, ya que la NBA posee una de las comunidades más grandes en el mundo.

La pasión de los fanáticos del básquetbol no conoce fronteras y es una cita obligada que se disfruta con mucha pasión.

Es una noche especial para mi y para muchos neoyorkinos.

Una noche de otoño en el Madison Square Garden en Nueva York, donde miles de fanáticos emocionados se preparan para ver a su equipo favorito.

Y mientras comes un poco de aquí y de allá, y la gente espera, los jugadores de los Knicks y los Cavaliers de Cleveland calientan en la cancha de este icónico estadio donde por lo menos 80 jugadores de la NBA de América Latina y el Caribe entre retirados y activos han hecho sus sueños realidad.

Robín López jugador de los Knicks , de padre cubano, entiende lo que se siente cuando se escucha el pitazo inicial.

"Yo siento algo muy especial cuando juego para la selección de Estados Unidos o cuando tengo seguidores cubanos en las gradas. Y yo sé para mis compañeros pasa algo similar cuando José ve la bandera española, eso es un gran honor, es algo muy especial, va aquí", indicó López señalado su corazón, mientras conversábamos en el camerino de los Knicks.

La pasión por este deporte traspasa fronteras y la transmisión en 47 países de Latinoamérica y el Caribe hace de los juegos de la liga profesional de baloncesto un destino obligado, me explicó Ricardo Romero, mexicano de Monterrey, mientras trataba de llegar a su silla con su grupo de amigos para quienes este juego es el primer evento de la despedida de soltero de uno de sus amigos.

"Es un deporte muy visto allá en México que nunca tenemos la oportunidad de poder disfrutar, poder ver a los jugadores en vivo, por eso decidimos disfrutarlo aquí", reveló Romero.

Mientras la música que recibe a los equipos a la chacha se escuchaba y la vibración en el estadio hacia evidente que el encuentro iba a satisfacer a los espectadores como Rafael Blanes de Puerto Rico a quien le gusta el baloncesto y aprovecha cada vez que está en Nueva York.

Esta vez los Cavaliers vencieron a los Knicks 90-84.

Y el reñido juego fue seguido -además- por las redes sociales muy de cerca, ya que la NBA posee una de las comunidades más grandes en el mundo con gran seguimiento en Brasil, México, Venezuela, Argentina, Colombia y Chile.

Los presentes, como yo, sentimos la emoción de este juego en cada una de las canastas que logran encestar leyendas como el mismo Lebron James, a quien esta noche vimos jugar y dejó claro su estatus de súper estrella.

Debo confesar que es una experiencia única que quizás deba repetir con frecuencia, después de todo Nueva York es mi hogar.

“Historias de Nueva York” son una serie de artículos escritos por Celia Mendoza, periodista de la Voz de América, desde Nueva York, con una óptica personal y humana.