En una inédita acción de Jueves Santo, pero tradición para el cardenal Jorge Bergoglio, el ahora convertido en papa Francisco lavó los pies a un grupo de jóvenes detenidos, entre ellos dos chicas, en la cárcel para menores de Roma de "Casal del Marmo".
"Quien está en lo más alto debe servir a los otros", dijo el Papa argentino, quien preside por primera vez como pontífice los tradicionales ritos de Semana Santa.
El Papa argentino conmemoró la última cena de Cristo y sus discípulos lavando los pies a 12 jóvenes de distintas nacionalidades, que también participaron en la misa, junto a 38 internos más.
"Esto es un símbolo y un gesto: lavar los pies quiere decir que estoy a tu servicio", explicó Francisco.
La ceremonia fue acompañada por alabanzas y música religiosa, y fue transmitida únicamente por la Radio Vaticano para proteger la imagen de los detenidos.
"Piensen que con esta ceremonia de lavarse los pies se demuestra que se está dispuesto a ayudar a los demás. Piensen que es como una caricia de Jesús, porque vino para eso, para ayudarnos", dijo el pontífice que también lavó los pies a una chica musulmana.
Para hablar sobre esta ceremonia, la periodista de la Voz de América conversó con el padre José Eugenio Hoyos, director del Apostolado Hispano en la Diócesis de Arlington, Virginia, y esto fue lo que nos dijo:
"Quien está en lo más alto debe servir a los otros", dijo el Papa argentino, quien preside por primera vez como pontífice los tradicionales ritos de Semana Santa.
El Papa argentino conmemoró la última cena de Cristo y sus discípulos lavando los pies a 12 jóvenes de distintas nacionalidades, que también participaron en la misa, junto a 38 internos más.
"Esto es un símbolo y un gesto: lavar los pies quiere decir que estoy a tu servicio", explicó Francisco.
La ceremonia fue acompañada por alabanzas y música religiosa, y fue transmitida únicamente por la Radio Vaticano para proteger la imagen de los detenidos.
"Piensen que con esta ceremonia de lavarse los pies se demuestra que se está dispuesto a ayudar a los demás. Piensen que es como una caricia de Jesús, porque vino para eso, para ayudarnos", dijo el pontífice que también lavó los pies a una chica musulmana.
Para hablar sobre esta ceremonia, la periodista de la Voz de América conversó con el padre José Eugenio Hoyos, director del Apostolado Hispano en la Diócesis de Arlington, Virginia, y esto fue lo que nos dijo: