Michael Avenatti, el abogado que saltó a la fama por representar a la actriz porno Stormy Daniels en sus enfrentamientos con el presidente Donald Trump, fue acusado el miércoles de haberla estafado.
Los fiscales federales de la ciudad de Nueva York dijeron que Avenatti usó un documento manipulado para desviar alrededor de 300.000 dólares que Daniels se suponía iba a recibir por un contrato para la publicación de un libro, y luego utilizó el dinero para gastos personales y de negocios. Sólo la mitad de la suma fue regresada, agregaron los fiscales.
Daniels no es nombrada en el documento entregado a la corte, pero los detalles del caso _incluida la fecha en que su libro fue publicado_ dejaron claro que ella es la clienta involucrada.
Avenatti negó las acusaciones a través de Twitter.
``Ningún dinero relacionado a la señorita Daniels fue malversado o mal manejado. Recibió servicios legales valuados en millones de dólares y destinamos enormes cantidades a gastos. Únicamente hizo un pago directo de 100.000 dólares por todo lo que recibió. Estoy deseoso de que el jurado escuche la evidencia", tuiteó.
Los cargos se suman a acusaciones anteriores sobre conducta indebida legal por parte de Avenatti, quien representó a Daniels cuando interpuso una demanda para ser liberada de un acuerdo de confidencialidad que involucraba un presunto amorío con Trump.
Anteriormente, Avenatti fue acusado en Nueva York de intentar extorsionar hasta 25 millones de dólares a Nike bajo la amenaza de que iba a divulgar que el fabricante de zapatos deportivos pagó a jugadores de basquetbol de preparatoria para que fueran a las universidades que patrocinaba.
Y en Los Ángeles enfrenta una acusación federal de múltiples cargos, en la que se argumenta que robó millones de dólares a sus clientes, no pagó impuestos, cometió fraude bancario y mintió durante un procedimiento de quiebra.
Avenatti ha negado las acusaciones en su contra en ambas costas del país y ha dicho que espera ser exonerado. Tan sólo los cargos de Los Ángeles conllevan una posible sentencia de más de 300 años en prisión.
Daniels, cuyo nombre real es Stephanie Clifford, contrató a Avenatti para se hiciera cargo de una demanda que ella presentó el año pasado en la que intentaba invalidar un acuerdo de confidencialidad que firmó con el entonces abogado de Trump, Michael Cohen, a cambio de 130.000 dólares.
Se suponía que el dinero iba a comprar su silencio sobre un presunto amorío con el presidente, que niega que tal cosa haya ocurrido. En agosto, Cohen se declaró culpable de quebrantar las leyes financieras de las campañas políticas en relación con el pago.
En noviembre, Daniels comenzó a plantear inquietudes sobre la conducta de Avenatti.
___
