Ante la presión social y la violencia desatada en las últimas horas en Bolivia, el presidente Evo Morales llamó la mañana del domingo a nuevas elecciones con la conformación de un nuevo Tribunal Supremo Electoral (TSE). El Ministerio Público del país ya inició el proceso.
“Convocar a nuevas elecciones nacionales que mediante el voto permita al pueblo boliviano a elegir democráticamente a sus nuevas autoridades incorporando a nuevos actores políticos", dijo Morales a tiempo de llamar a la pacificación del país que ya lleva 20 días de movilizaciones denunciando fraude electoral.
Esta misma tarde, el Ministerio Público anunció, a través de un comunicado, que se iniciaron las acciones legales correspondientes para el procesamiento y juzgamiento de todos los vocales del TSE.
Esta decisión llegó luego de que la Organización de Estados Americanos (OEA) recomendara la anulación de los comicios del 20 de octubre, aunque el mandatario no hizo mención al informe durante su conferencia de prensa.
Morales en declaraciones posteriores con radio Panamericana, dijo enfáticamente que no renunciará: “Yo tengo un rol constitucional, termino mi gestión el 21 de enero del próximo año, quienes insinúan (la renuncia) están con golpe de estado".
El candidato opositor Carlos Mesa, se pronunció y aseguró que se debe llamar a un nuevo proceso electoral en el que no esté el binomio oficialista del presidente Evo Morales y el vicepresidente, Álvaro García Linera, y pidió a la población continuar con las movilizaciones pacíficamente.
"Si le queda un ápice de patriotismo debe dar un paso al costado", le dijo Mesa a Morales.
El informe preliminar de la OEA indica que se identificaron irregularidades “muy graves” que cuestionan el accionar del órgano electoral boliviano que determinó el triunfo del presidente Evo Morales en primera vuelta, con el 47,08% de los votos.
“Teniendo en cuenta las proyecciones estadísticas, resulta posible que el candidato Morales haya quedado en primer lugar y el candidato Mesa en segundo. Sin embargo, resulta improbable estadísticamente que Morales haya obtenido el 10% de diferencia para evitar una segunda vuelta”, se explica en una parte de las conclusiones.
Morales aseguró que en las siguientes horas, la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) en coordinación con todas las fuerzas políticas definirán los procedimientos para elegir a los nuevos vocales del TSE; sin embargo, el anuncio es considerado como insuficiente por los movilizados quienes decidieron mantener la presión en las calles hasta conseguir la renuncia del primer mandatario.
Las unidades policiales amotinadas en todo el país mantendrán vigilia con el apoyo de la ciudadanía.
Suman las renuncias del oficialismo
En las últimas horas se registraron varias renuncias de autoridades del partido oficialista en medio de la presión social y también acciones de violencia registradas en sus viviendas.
El ministro de Minería, César Navarro, presentó la renuncia a su cargo denunciando que manifestantes incendiaron su casa y agredieron a su sobrino.
Posteriormente, el presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, presentó su dimisión con lágrimas en los ojos, pidiendo garantías porque también prendieron fuego a su vivienda y golpearon a su hermano.
Estas dos, ahora exautoridades, pertenecen al municipio de Potosí, la región que en este momento ejerce más presión al gobierno central, debido a la violencia ejercida contra sus manifestantes en una caravana que se dirigía a La Paz, que dejó mineros heridos de bala.
La otra autoridad de gabinete que renunció fue el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, a través de su cuenta de Twitter, pidiendo que se “regrese al camino de la paz social y de la unidad”.
Hasta el momento se tienen 15 renuncias en menos de 48 horas.
