Después de más de 12 días de travesía y sin ningún puerto que les permitiera echar amarras, los cruceros Zaandam y Rotterdam, propiedad de la subsidiaria Carnival, arribaron este jueves al puerto Everglades, al norte de Miami.
El gobernador de la Florida, Ron DeSantis, se había mostrado en contra de que llegaran las embarcaciones, especialmente porque “se había trabajado muy duro para conseguir camas de hospital” y no quería que fueran ocupadas por los pasajeros de los cruceros.
La opción que había dado el mandatario estatal fue la de brindar apoyo médico en alta mar, pero su intención era que no atracaran. Fue entonces cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, manifestó que se trataba de una situación “humanitaria” y que se debía encontrar una solución.
![Presos de confianza forman parte del proyecto de elaboración de material de limpieza para combatir el coronavirus en El Salvador. [Foto: cortesía Dirección General Centros Penales]](https://gdb.voanews.com/e4563656-45e2-4bcd-a08d-bf0d7e36ff60_w100_r1.jpg)
Finalmente, fue el Comando Unificado, formado por varios representantes de agencias de Estados Unidos, el que determinó que se debía autorizar que los dos cruceros, con más de 1.200 pasajeros, pudieran atracar.
La llegada de las embarcaciones había generado una gran polémica, sobre todo porque no había ningún puerto que les permitiera su acceso por miedo a incrementar los contagios por COVID-19.
Se sabe que en las embarcaciones había, por lo menos, una veintena de personas que habían dado positivo al coronavirus y unos 200 pasajeros tenían síntomas de la gripe. También habían muerto cuatro personas.
Fue por esa razón que se demoró la decisión de permitir, o no, la entrada de este barco. El Zaandam estuvo varios días anclado en las costas de Panamá esperando poder cruzar el canal y para dirigirse a la costa estadounidense.
En su interior, decenas de pasajeros clamaban a las autoridades para encontrar una solución, algo que finalmente ocurrió este jueves.
Los pasajeros más enfermos fueron trasladados inmediatamente a un hospital del condado de Broward mientras que la mayoría de turistas extranjeros fueron llevados al aeropuerto a la espera de tomar el primer avión para llegar a sus países de origen cuanto antes.
Hasta el momento, se desconoce si algunas de las personas que iban a bordo de estos cruceros harán cuarentena en el interior de los barcos.
Por otro lado, la compañía Princess Cruises ha confirmado que una de sus embarcaciones se dirige a ese mismo puerto con un número “por encima de lo normal” de pasajeros con síntomas parecidos a la gripe.
