Gran parte de los más de 11.000 migrantes ilegales varados en Necoclí, en el norte de Colombia, son de nacionalidad haitiana. Provienen de Chile y Brasil, donde vivieron por un tiempo hasta hacerse de los medios suficientes para seguir camino a Estados Unidos. Ahora esperan poder conseguir los pasajes para primero llegar vía marítima hasta Capurganá, y luego atravesar la selva del Tapón del Darién hasta Panamá. La Voz de América captura de cerca el drama de este grupo de migrantes. [Fotos tomadas por David Hernández el 3 y 4 de agosto de 2021]