El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este viernes que los comicios del mes de noviembre serán "el mayor desastre electoral de la historia" debido al voto por correo, cuyas papeletas, según dijo, serán falsificadas por Rusia, China y otros países.
“Este va a ser el mayor desastre electoral de la historia. Por cierto, chicos ¿queréis hablar de Rusia y China y de otros lugares? Podrán falsificar papeletas, las falsificarán. Harán lo que haga falta", dijo el mandatario a un grupo de periodistas durante un acto con representantes de las fuerzas de seguridad celebrado en la Casa Blanca.
Hasta la fecha, diversas investigaciones, tanto del Congreso como de los servicios de inteligencia estadounidenses, han concluido que el Kremlin está intentando interferir en las elecciones, aunque todos los informes apuntan a actividades informáticas y ninguno ha resaltado una posible falsificación de papeletas.
Trump insistió en que “la votación por correo es un desastre" y sostuvo que los gobernadores de los estados que conforman el país van a enviar "enviar millones de boletas" sin saber siquiera "adónde".
En los últimos meses, el presidente ha expresado su rechazo al voto por correo, una opción que gana enteros en el país ante el avance de la pandemia, ya que considera que faltan mecanismos para garantizar el envío y el manejo de estos sufragios.
Sin embargo, cada vez más estados han comenzado a enviar papeletas, conscientes de que muchos ciudadanos prefieren evitar el tener que ir a las urnas para no tener que formar parte de aglomeraciones en las que las posibilidades de contagio de la covid se incrementan exponencialmente.
Ante tal situación, Trump insinuó el jueves que quizás sería conveniente posponer los comicios, una opción para la que necesitaría el respaldo de las dos cámaras del Congreso, lo cual parece poco probable.
“La gente debería ir a votar o solicitar el voto en ausencia", subrayó Trump este viernes, instantes después de confirmar que esta segunda opción será la que él mismo elija para no tener que desplazarse a Florida, donde le corresponde depositar su papeleta.
Horas antes, durante una rueda de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, rechazó pronunciarse sobre la posibilidad de que el Ejecutivo destine fondos adicionales para garantizar que el proceso de voto por correo cumple con todas las garantías.