Con el anuncio del presidente de Estado Unidos, Donald Trump, este jueves, ya serían cinco los líderes de la región que han dado positivo por COVID-19 desde el inicio de la pandemia.
El propio Trump, de 74 años, fue quien dio a conocer la noticia, mediante un mensaje divulgado en su cuenta oficial de Twitter.
"Esta noche, @FLOTUS y yo dimos positivo por COVID-19. Comenzaremos nuestro proceso de cuarentena y recuperación de inmediato. ¡Saldremos de esto JUNTOS!", escribió Trump en un tuit en la madrugada del viernes.
El mandatario se encuentra ya ingresado en el Centro Médico Militar Walter Reed, donde permanecerá durante "los próximos días", según informó la Casa Blanca, que agregó que el mandatario "permanece de buen humor, con síntomas leves y ha permanecido trabajando a lo largo del día".
En una tónica similar se produjeron los anuncios de los demás presidentes de la región que se han enfrentado a la enfermedad.
El más reciente en informar sobre su contagio fue el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, el pasado 18 de septiembre. Giammattei, de 64 años, aseguró a finales de mes que se encontraba “bien” y que continuaría trabajando.
Esta misma semana, el gobierno de Guatemala decidió no prorrogar el estado de calamidad decretado el pasado 5 de marzo, por lo que ya no hay toque de queda y volvieron a activarse espacios públicos, como los parques.
Giammattei pidió a los guatemaltecos que respeten "las medidas de prevención” y pidió tomarse esta nueva etapa “con responsabilidad”.
En la lista le sigue la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, de 53 años, quien recibió su diagnóstico el 9 de julio. Fue dada de alta unas tres semanas después.
Bolivia, con más de 135.000 casos positivos registrados hasta el momento, se encuentra en plena campaña de cara a los comicios generales fijados para el 18 de octubre.
Añez retiró su candidatura a mediados de septiembre asegurando que lo hacía “para cuidar la democracia”. “No es un sacrificio, es un honor”, agregó.
Anteriormente fue Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, quien anunció su diagnóstico el 7 de julio. El mandatario, de 65 años de edad, anunció, luego de pasar tres semanas trabajando desde su casa y de un segundo positivo, que se había recuperado.
Sin embargo, días después, el 30 de julio, fue su esposa Michelle Bolsonaro, la que dio positivo. Volvió someterse a la prueba dos semanas después y resultó negativa.
Brasil es el tercer país del mundo, y segundo de la región -solo superado por por EE.UU.- en número de contagios, según el registro de la Universidad Johns Hopkins.
De los primero de los líderes en dar positivo fue Juan Orlando Hernández, presidente de Honduras, quien anunció el 16 de junio que él y su esposa, Ana García, dieron positivo para coronavirus.
Al principio se anunció que Hernández, de 51 años, tenía síntomas leves, pero tuvo que ser internado en el hospital por neumonía. Fue dado de alta dos semanas después, el 2 de julio, pero siguió en aislamiento trabajando a distancia.
El ahora presidente de República Dominicana, Luis Abinader, de 53 años, y su esposa, Raquel Arbaje, dieron positivo por coronavirus en plena campaña. El entonces candidato logró recuperarse antes de la elección, el 5 de julio. Abinader tomó posesión a mediados de agosto.
Hay otros casos reseñables, como el del primer ministro canadiense, Justin Trudeau. En este caso, en realidad, fue su esposa, Sophie Trudeau, quien resultó positivo por el virus. Ambos se mantuvieron aislados durante mediados de marzo, pero el mandatario siguió con sus labores.
En el caso de Venezuela, han sido varios los funcionarios de alto rango que han dado positivo por COVID-19 y se han recuperado satisfactoriamente.
Es el caso de Diosdado Cabello, presidente de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente; Tareck El Aissami, el ministro de Petróleo; Jorge Rodríguez, exministro de comunicación; y Maikel Moreno, presidente del Tribunal Supremo de Justicia.