Las autoridades nicaragüenses han decretado alerta roja para la región autónoma del Caribe Norte del país y para el sector llamado Triángulo Minero, ubicado a unos 300 kilómetros de distancia de Managua por el huracán “ETA”, el cual se mantiene en categoría 4, y que impactaría en la zona durante las próximas horas, según el más reciente informe del Centro Nacional de Huracanes.
El gobierno de Nicaragua ha activado al Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (SINAPRED) quien anunció en conferencia la noche de este lunes 2 de noviembre que se han movilizado a albergues improvisados, al menos 4.000 familias que se encontraban en zonas vulnerables.
La vicepresidenta Rosario Murillo indicó que desde el lunes 26 de octubre se empezó a vigilar de cerca el fenómeno meteorológico en el Caribe, por lo que se procedió a advertir a las instituciones correspondientes y se llevaron a cabo reuniones virtuales para garantizar el máximo de organización.
Añadió que a la zona ya fueron enviadas 88 toneladas de alimento con apoyo del Programa Mundial de Alimentos (PMA).
De momento se han reportado fuertes vientos y lluvias en la zona. Algunos árboles han caído producto de ello, según reportan medios locales.
Albergues en mal estado
Deborah Escobar, del Centro por la Justicia y Derechos Humanos de la Costa Atlántica de Nicaragua (CEJUDHCAN) dijo a la Voz de América que la situación es preocupante en el local pues los albergues se encuentran llenos.
“Aparte de los albergues que están llenos, hay casas, en las que de manera solidaria se están dando refugios entre vecinos. Aquellas casas que tienen una construcción más vulnerable están resguardados en casas de vecinos que tienen casas de concreto y en buen estado”, explicó Escobar.
Por otro lado indicó que aunque los albergues oficiales están en condiciones buenas, por la intensidad de los vientos hay temor que los techos no puedan resistir.
Falta de medidas por el COVID-19
Según videos divulgados en la zona, la condición para los refugiados es preocupante por el hacinamiento en que se encuentran y la falta de mascarillas que podría ocasionar un rebrote del nuevo coronavirus, el cual en estos momentos se encuentra en aparente descenso.
El Comité Multidisciplinario, conformado por médicos independientes de Nicaragua alertó a la población a seguir con las recomendaciones para evitar un repunte de casos de coronavirus.
“Todo tipo de aglomeración o grupo de gente se convierte en un espacio de alto riesgo para contagiarse y enfermar de COVID-19, debido a que existe mayor riesgo de circulación del coronavirus”, señalaron en un comunicado.
Sugirieron que si alguno de los refugiados presentaba síntomas asociados al COVID-19, se lo hiciera saber al coordinador del albergue o al responsable de salud para que le atiendan y orienten.