El proyectado presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el lunes que nominará a Alejandro Mayorkas como secretario de Seguridad Nacional y, por lo tanto, en caso de ser confirmado por el Senado, se convertirá en el primer latino e inmigrante en ocupar el cargo y enfrentará la herencia de las duras políticas migratorias del gobierno del presidente Donald Trump.
Mayorkas, originario de La Habana, Cuba, fue vicesecretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) durante el gobierno del presidente Barack Obama, cuando Biden ocupó la vicepresidencia.
La familia de Mayorkas llegó a EE.UU. cuando él tenía poco más de un año, huyendo como refugiados políticos de la isla.
“Cuando era muy joven, EE.UU. nos dio a mi familia y a mí un lugar de acogida”, escribió el jurista en su cuenta de Twitter después de que se produjera el anuncio. “Ahora, he sido nominado para ser secretario del DHS y vigilar la protección de todos los americanos y aquellos que huyen de la persecución en busca de una mejor vida pera ellos y para sus seres queridos”.
Bajo el mandato en Mayorgas, el DHS desarrolló e implementó el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que protege de la deportación a más de medio millón de jóvenes que llegaron al país de manera irregular siendo niños.
El gobierno Trump intentó acabar con el programa, pero sus planes fueron frustrados por varios jueces federales y, finalmente, por la Corte Suprema. Una de las promesas de campaña de Biden es restaurar el DACA, en el primer día de mandato y trabajar por otorgar a los dreamers -como se les conoce a los beneficiaros del programa- una vía hacia la ciudadanía.
El gobierno de Obama, sin embargo, fue ampliamente criticado por activistas en pro de los derechos de los migrantes por el aumento en el número de deportaciones. Más de tres millones de personas fueron enviadas de vuelta a sus países mientras Biden fue vicepresidente (2009-2017), un incremento de un millón en comparación con el total de deportaciones con orden judicial bajo la anterior administración republicana, con George W. Bush (2001-2008) a la cabeza.