El gobierno de Estados Unidos condenó el martes en un comunicado la situación en que se encuentra un grupo de activistas y artistas contestatarios en La Habana, Cuba, en protesta por el encarcelamiento del defensor de derechos humanos, Denis Solís González.
En la declaración, el secretario de Estado, Mike Pompeo, dijo que EE.UU. “condena enérgicamente el hostigamiento del régimen cubano a los activistas que protestan pacíficamente por el encarcelamiento”, de Solís.
“El régimen ha atacado repetidamente al Sr. Solís González, músico y miembro del Movimiento San Isidro (MSI), por ejercer su libertad de expresión al denunciar los continuos abusos contra los derechos humanos en Cuba”, expresó.
El Movimiento San Isidro es un grupo de artistas, periodistas y académicos que ha tenido varios enfrentamientos con las autoridades de la isla, incluyendo sus protestas contra las leyes que rigen la creación artística e independiente.
Según informó EE.UU., desde el pasado viernes, varios de los opositores se declararon en huelga de hambre, aunque algunos han abandonado esta extrema medida de protesta.
Solís estuvo incomunicado durante tres días y luego lo sentenciaron a ocho meses de prisión por un dudoso cargo de "desacato", indica el Departamento de Estado.
Las protestas por el encausamiento al músico alternativo concluyeron en el arresto de varios activistas. Desde la semana pasada las autoridades policiales han bloqueado el acceso a la sede del MSI, donde el artista del performance Luis Manuel Otero Alcántara y otros acudieron en reacción a la medida de dejar de ingerir alimentos.
“Si bien los periodistas internacionales [acreditados en la isla] han sido retirados físicamente de la escena, el mundo está observando lo que está sucediendo”, advirtió Pompeo, quien arengó: “Hacemos un llamado a los aliados democráticos de todo el mundo para que alcen sus voces y hagan del respeto de los derechos humanos un requisito previo para cualquier trato con el régimen de Castro”.