El gobierno de Estados Unidos sancionó el jueves a la corporación de defensa iraní Shahid Meisami Group, según fuentes oficiales estadounidenses, dirigida por Mehran Babri, a quien señala por supuestamente estar involucrado “en actividades preocupantes con armas químicas”.
El Departamento de Estado ratificó en un comunicado que “condena cualquier participación del régimen iraní en un programa de armas químicas”.
La sanción está sujeta a la Orden Ejecutiva 13382, que señala a “los proliferadores de armas de destrucción masiva (ADM, por sus siglas en inglés)” o sistemas vectores de este armamento y sus partidarios.
El comunicado establece que la empresa militar está bajo el control de la Organización Iraní de Investigación e Innovación Defensiva (SPND), que anteriormente fue sancionada de conformidad con las leyes estadounidenses.
Los requerimientos de EE.UU. están enfocados en los vínculos de la compañía con actividades que habrían generado inquietudes “respecto a las obligaciones de Irán en virtud de la Convención sobre Armas Químicas” para ser usadas como supuestos “agentes de incapacitación química”.
Las medidas anunciadas incluyen la congelación de activos estadounidense en poder de Shahid Meisami Group y de Mehran Babri, así como la negación al acceso por parte de cualquiera de los dos –persona y entidad- al sistema financiero de Estados Unidos.
“A Estados Unidos le preocupa la verdadera intención del régimen con respecto a la prueba y producción de estos llamados agentes de incapacitación química, que podrían usarse para oprimir aún más a los ciudadanos iraníes con fines ofensivos”, concluye el comunicado.
A pesar de la tirantez reinante, Irán ha dado pasos en este 2020 hacia una posible distensión.
