El presidente electo de Estados Unidos Joe Biden denunció este martes los retrasos en la distribución de vacunas contra la COVID-19 en Estados Unidos, y lamentó la “inactividad del presidente en funciones Donald Trump”. Biden dijo que Trump, “se ha quedado atrás de las expectativas”.
Las declaraciones fueron dadas desde Wilmington, Delaware, lugar donde Biden tuvo una reunión informativa con su equipo asesor de COVID-19.
"El plan de la administración Trump para distribuir vacunas se está quedando atrás", dijo Biden, prometiendo: "Voy a mover cielo y tierra para que vayamos en la dirección correcta".
Biden reprochó el hecho de que a la fecha solo se hayan vacunado a unos 2 millones de personas, muy por debajo de los 20 millones que Trump había prometido para fin de año.
Según los últimos datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), solo unos 2,1 millones de personas han recibido una primera inyección de una de las dos vacunas autorizadas (Pfizer / BioNTech y Moderna).
Por su parte, el presidente Donald Trump reaccionó a la acusación de Biden en Twitter al asegurar que "Depende de los Estados distribuir las vacunas una vez que el Gobierno Federal las transporta a las áreas designadas. No solo hemos desarrollado las vacunas, incluida la aportación de dinero para que el proceso avance rápidamente, sino que las hemos llevado a los estados. ¡Biden falló con la gripe porcina!", acusó el mandatario en su cuenta de Twitter.
Biden también se comprometió que cuando asuma el cargo como presidente emprenderá el "mayor desafío operativo que hemos enfrentado como nación" para vacunar contra el virus que ya ha cobrado más de 1,7 millones de vidas en todo el mundo.
Biden, que asumirá el cargo el 20 de enero, confirmó que invocaría la Ley de Producción de Defensa de la era de la Guerra de Corea para obligar a la industria privada a aumentar la producción de vacunas para el gobierno.
También hizo un llamado a los estadounidenses a usar máscaras para evitar la propagación de la COVID-19 y dijo que impondría un mandato sobre las cubiertas faciales en áreas donde el gobierno federal tiene jurisdicción, como los aviones.
"Estamos planeando un esfuerzo de todo el gobierno y vamos a trabajar para establecer sitios de vacunación y enviar unidades móviles a comunidades de difícil acceso", apuntó.
"Vamos a asegurarnos de que las vacunas se distribuyan de manera equitativa para que cada persona pueda recibir una, sin importar el color de su piel y el lugar donde viva".
Expresó su confianza en un regreso a la normalidad en 2021, pero no de inmediato.
"Las próximas semanas y meses van a ser muy difíciles, un período muy difícil para nuestra nación, tal vez el más difícil durante toda esta pandemia", puntualizó.