El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en sus primeras semanas en el cargo, enfrenta crecientes llamados de grupos de derechos civiles para convertir en acciones las promesas de campaña sobre la reforma de la Policía y la justicia penal.
“Queremos que Biden cumpla con la agenda de justicia racial”, dijo a la Voz de América Melanie Campbell, presidenta y directora ejecutiva de la Coalición Nacional para la Participación Cívica Negra.
En tanto parte de los que representan a las fuerzas del orden público dicen que quieren un asiento en la mesa antes de que la Casa Blanca tome ninguna decisión.
Biden tiene gran experiencia, seis mandatos como senador y un fuerte respaldo de las organizaciones policiales.
Se espera que el mandatario firme un decreto que establezca una comisión nacional sobre el uso de fuerza excesiva por parte de los agentes del orden.
"Creo que el presidente Biden tomará medidas en los primeros 100 días de su administración para abordar la reforma de la justicia penal", dijo Marc Moriel, presidente y director ejecutivo de la Liga Urbana Nacional.
"Esperamos que la administración impulse la aprobación de la Ley de Justicia y Vigilancia en el Congreso", dijo Moriel a la VOA e insistió en que la única forma de cambiar la policía es con "una ley federal fuerte".
Las demandas de acción federal se aceleraron en el verano de 2020 cuando el afroestadounidense George Floyd murió bajo custodia policial en Minneapolis, Minnesota. Derek Chauvin, un oficial de policía blanco, fue acusado de asesinato no intencional en segundo grado después de que se arrodilló en el cuello de Floyd durante más de 8 minutos, un incidente capturado en video.
El presidente Biden describió la muerte de Floyd como un "punto de inflexión" en el cálculo de la nación sobre el racismo sistémico.
La Ley de Justicia en la Policía de George Floyd de 2020, estancada desde el año pasado, busca responsabilizar a los agentes de policía de todo el país por conductas indebidas y abusos, como el uso excesivo de la fuerza, y combatir la discriminación racial en la aplicación de la ley, entre otros objetivos.
Biden, en un acto de campaña propuso asignar 300 millones de dólares para promover programas de policía comunitaria.
Las organizaciones encargadas de hacer cumplir la ley están mostrando cautela ante las iniciativas federales de Biden. “Creo que algunos líderes policiales sienten una sensación de abandono después de escuchar algunas de las propuestas de políticas del señor Biden antes de ser elegido”, dijo a la VOA Bill Johnson, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Organizaciones Policiales.
En un comunicado, el grupo, que representa a más de 241.000 agentes del orden público, pidió un diálogo con la Casa Blanca “para garantizar que los oficiales de base tengan voz y estén representados en una comisión que examinaría la Policía y recomendaría cambios para la mejora del sistema".