Un funcionario del Departamento de Estado explicó el viernes que "algunos aspectos" de a la política de Washington hacia Venezuela no están bajo revisión y responsabilizó al presidente Nicolás Maduro por la grave crisis que atraviesa el país latinoamericano.
“Hay algunos aspectos sobre nuestra política hacia Venezuela que no están pendientes de revisión, y eso es un hecho”, dijo el portavoz de la diplomacia estadounidense, Ned Price, a preguntas de un periodista.
Price recalcó la postura de la Administración del presidente Joe Biden: “Nicolás Maduro es un dictador y su represión, su corrupción, y mala gestión sabemos que han creado una de las peores crisis humanitarias que hemos visto en este hemisferio”.
El vocero estadounidense recordó la concesión esta semana del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) a los migrantes venezolanos por 18 meses y dijo que el Gobierno continuará “buscando formas de abordar las preocupaciones humanitarias de millones de venezolanos” y que lo hará apoyándose en sus socios internacionales.
“Continuamos buscando apuntar a los funcionarios del régimen [de Maduro] y sus compinches involucrados en la corrupción y los abusos de los derechos humanos”, indicó Price y agregó que el empeño de la Administración es restaurar la democracia para los venezolanos “a través de elecciones justas y una recuperación económica a largo plazo”.
El Departamento de Estado dejó en claro que EE. UU. reconoce al presidente interino Juan Guaidó como el “elegido por la Asamblea Nacional para ser su presidente constitucional”.
Price aseveró que el gobierno estadounidense trabaja para fortalecer la coordinación con algunos de sus socios internacionales como la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos y el Grupo de Lima para avanzar hacia “una transición democrática pacífica en Venezuela”, y por tanto, continuará exigiendo “elecciones libres y justas” en el país.