Enlaces para accesibilidad

Informe de inteligencia de EE.UU. alerta de incremento del crimen, migraciones y crisis política en América Latina


Manifestantes exigen la renuncia del presidente paraguayo Mario Abdo Benítez, frente al Congreso en Asunción, el 5 de abril de 2021.
Manifestantes exigen la renuncia del presidente paraguayo Mario Abdo Benítez, frente al Congreso en Asunción, el 5 de abril de 2021.

La comunidad de inteligencia de Estados Unidos evalúa las amenazas y destaca las principales preocupaciones a nivel global y el impacto en regiones como América Latina.

El reciente informe de los servicios de inteligencia de Estados Unidos, sobre la evaluación de amenazas a la seguridad nacional, advierte que como consecuencia de la pandemia de COVID-19 América Latina experimentaría un incremento en la pobreza, las migraciones, el crimen organizado y el tráfico de drogas, y prevé una mayor presión en la frontera sur del país con los grupos irregulares de migrantes.

A nivel regional también alerta sobre la volatilidad política en el hemisferio occidental con una mayor polarización y la frustración pública que ha aumentado por las profundas recesiones económicas a causa de la pandemia, lo que también ha agravado las preocupaciones del público sobre delincuencia y corrupción oficial generalizada.

Las protestas sociales como las ocurridas en Guatemala, Colombia y Perú, explica el informe, son parte de esas frustraciones; también destaca los próximos eventos electorales de Honduras y Nicaragua que transcurren en medio de una fuerte polarización.

“América Latina llevará a cabo varias elecciones presidenciales y legislativas este año, algunas de las cuales como Honduras y Nicaragua están llevándose a cabo en medio de un fuerte entorno polarizante, resultados que muy probable den paso a denuncias de fraude”, explica el informe, publicado el 9 de abril reciente.

Para Venezuela la comunidad de inteligencia no prevé una solución inmediata a la crisis y advierte que el deterioro auspiciado por la crisis política y económica en el país petrolero seguirá impulsando las migraciones de venezolanos hacia otros países del cono sur.

Esto generaría, -a juicio de la comunidad de inteligencia- mayor presión en los gobiernos de las naciones vecinas que por añadidura hacen frente a serios desafíos de la crisis económica derivada de la pandemia y con altas tasas de mortalidad a causa de COVID-19.

Crimen organizado y explotación de migrantes

El entorno de inestabilidad en la región vaticina el reporte, también podría aumentar la delincuencia y el tráfico de estupefacientes, una probabilidad auspiciada por el aumento de la pobreza y la falta de recursos para los cuerpos de seguridad y de justicia de los estados.

También señala que los grupos delictivos y del crimen organizado utilizan la explotación de los migrantes como artilugio para distraer la atención de sus otras actividades criminales de gran calado.

“Los grupos delictivos organizados transnacionales explotan a los migrantes mediante la extorsión, el secuestro y el trabajo forzoso y facilitan la migración para desviar la atención de sus otras actividades ilícitas”, reza el documento.

También la comunidad de inteligencia señala que los efectos combinados de la pandemia, los devastadores huracanes que afectaron a Centroamérica el año pasado, y la percepción de un cambio en la política migratoria de Estados Unidos están creando las condiciones para un resurgimiento de las migraciones irregulares.

Estas previsiones de inteligencia para el próximo año se adelantan con las cifras ofrecidas por la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés) que indican que en marzo 2021 se registraron más de 171 mil 331 detenciones en la frontera sur.

Estos miles de migrantes intentaban ingresar de forma irregular al territorio estadounidense provenientes de Honduras, Guatemala, El Salvador y México. La cifra es el mayor total mensual en 15 años con un aumento porcentual del 70 por ciento, según las estimaciones del CBP.

La evaluación de la comunidad de inteligencia también incluye diversas amenazas que fueron mencionadas en las conclusiones de otro informe de inteligencia presentado la semana pasada en el que se examinaron los posibles desafíos mundiales para los próximos 20 años.

A nivel global

El informe anual de los servicios de inteligencia de Estados Unidos sobre posibles amenazas que puede enfrentar el país el próximo año, advierte cómo los efectos de la pandemia del COVID-19 contribuirán a exacerbar las “crisis humanitarias y económicas, disturbios políticos y la competencia geopolítica”.

El documento además señala la forma en que “los regímenes autoritarios” explotarán con más frecuencia las herramientas digitales para “vigilar a sus ciudadanos, controlar la libertad de expresión y censurar y manipular la información para mantener el control sobre sus poblaciones”.

En cuanto al tema migratorio el reporte resalta la profundización de las causas que la impulsan, y dentro de éstas menciona “las disparidades económicas y los efectos del cambio climático y los conflictos”.

Por su parte la pandemia del COVID-19 toma especial relevancia como una de las raíces que alientan y alentarán los flujos migratorios y refugiados, así como los desplazamientos internos.

Según el dossier, la pandemia, que ya ha impactado los sistemas de salud en diferentes partes del mundo, traerá nuevas emergencias sanitarias y aumentará las tensiones a medida que los países compiten por los recursos. Las consecuencias económicas en los países en desarrollo han sido especialmente graves, con la inseguridad alimentaria en todo el mundo en su punto más alto en más de una década.

“Ningún país se ha salvado por completo, e incluso cuando haya vacunas distribuyéndose ampliamente a nivel mundial, las réplicas económicas y políticas se sentirán durante años”, advirtieron los funcionarios de inteligencia.

Síganos en redes sociales

XS
SM
MD
LG