Los padres de las víctimas y sobrevivientes de los tiroteos masivos en Buffalo y Uvalde comparecerán ante un comité de la Casa de Representantes la próxima semana en un esfuerzo por traer a Washington la devastación de la epidemia de violencia armada en Estados Unidos.
La representante demócrata por Nueva York Carolyn Maloney, presidenta del Comité de Supervisión, dijo el viernes que la audiencia examinará el impacto humano de la violencia armada y la urgencia de que los legisladores promulguen leyes de control de armas.
“Espero que todos mis colegas escuchen con el corazón abierto mientras los sobrevivientes de la violencia armada y sus seres queridos cuentan uno de los días más oscuros de sus vidas. (…) En última instancia, esta audiencia se trata de salvar vidas, y espero que impulse a mis colegas de ambos lados del pasillo a aprobar una legislación para hacer precisamente eso”, dijo Maloney en un comunicado.
El panel para la audiencia del miércoles incluirá el testimonio de la madre de un hombre de 20 años que recibió un disparo en el tiroteo masivo racista el mes pasado en un supermercado en Buffalo, Nueva York, así como los padres de una niña de 10 años asesinada a tiros en su escuela primaria en Uvalde, Texas, 10 días después.
El panel también escuchará a Miah Cerrillo, una estudiante de cuarto grado que se cubrió con la sangre de su compañero de clase muerto y se hizo la muerta para sobrevivir al tiroteo en Uvalde. El comité anunció que los testimonios se llevarán a cabo en persona o virtualmente.
El anuncio de la audiencia se produce días después de que el Comité de Supervisión iniciara una investigación sobre cinco fabricantes líderes de armas semiautomáticas utilizadas en los dos tiroteos recientes. El comité, controlado por una mayoría demócrata, no es ajeno a examinar la violencia armada en Estados Unidos. Pero la reciente ola de asesinatos masivos ha alcanzado un punto de ebullición en el Capitolio y en todo el país.
También llega un día después de que el presidente Joe Biden emitiera su llamamiento más fuerte hasta el momento para que el Congreso tome medidas sobre las armas a medida que se intensifican las conversaciones bipartidistas entre un grupo central de senadores.
No se espera que las discusiones privadas en el Senado, que está dividido 50-50 entre demócratas y republicanos, produzcan el tipo de reformas radicales que está considerando la Cámara de Representantes liderada por los demócratas, que aprobó una amplia legislación sobre verificación de antecedentes y luego pasará a una Prohibición de armas de asalto.
Un paquete de la Cámara Baja debatido el jueves, y aprobado por un comité, 25-19, es menos radical pero incluye una disposición que eleva la edad requerida para comprar armas de fuego semiautomáticas a 21 años. Esta todavía enfrenta escasas posibilidades en el Senado.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.