Decenas de niños, padres y habitantes de Guatire, a las afueras de Caracas, la capital de Venezuela, pegan con cuidado las tapas de plástico sobre la superficie previamente preparada con cemento en una extensa pared en la que ya se puede ver la figura de una colorida guacamaya.
El mural de 330 metros cuadrados en una avenida de Guatire, a 42 kilómetros al este de Caracas, es obra del artista plástico autodidacta Oscar Olivares, quien desde niño hace dibujos de fútbol de la liga local para luego entrar en el diseño de marcas comerciales, entre otros, en un trabajo que dio a conocer en redes sociales y donde su nombre se hizo conocido.
"El arte está siendo capaz de inspirar a la gente, motivarla y además ser parte de ese cambio de conciencia en torno al medio ambiente", dijo Olivares, de 25 años.
En el país "hay muchas personas que quizá han empezado a reciclar plástico por primera vez en su vida gracias a este mural y esperamos que ese hábito se empiece a mantener", agregó Olivares, rodeado de niños y adultos de Guatire y algunos de Caracas que llegaron con tapas plásticas de diversos colores y que colocan según el diseño del artista.
El proyecto fue anunciado en sus redes y de ahí que la gente se ha acercado a colabor con las tapas.
Tras casi dos semanas de trabajo en el mural, en el que dice que en total se usarán unas 300.000 tapas de varios colores, ya se pueden distinguir dos guacamayas de alas azules y cuerpo rojo que cruzan el cielo, tal como se puede ver rutinariamente en Caracas, donde las aves son una suerte de "terapeutas" naturales en medio de la crisis.
Olivares dijo que el espacio del muro se escogió en conjunto con la alcaldía, ya que tiene un parque enfrente "y nos permite hacer una transformación, no sólo de la pared, sino de todo el espacio. Además, al ser tan largo permite que en el futuro se siga extendiendo".
"La participación de la gente ha sido increíble, más de 500 personas en apenas cinco días", dijo Olivares esta semana. Aspira que el mural esté listo a fines de septiembre.
Osmara Aponte, una maestra de tareas dirigidas en Guatire, acudió en días recientes al mural con media docena de chicos para que vieran y colaboraran con el proyecto.
"A mí parece una iniciativa muy bonita siempre que sea en pro del arte y del clima", dijo Aponte. "El reciclaje, todo se puede reutilizar (...) desde una tapa hasta cualquier plástico, tiene utilidad", sostuvo.