La Policía Nacional de Haití informó el lunes que investiga la muerte de un periodista que, según testigos, fue alcanzado en la cabeza por un bote de gas lacrimógeno que los policías lanzaron contra un grupo de reporteros que se manifestaban. Según testigos, los oficiales también dispararon sus armas contra los periodistas.
El jefe de policía Frantz Elbé ofreció en un comunicado, sus condolencias a la familia y colegas de Romelson Vilsaint y agregó que los agentes se vieron obligados a lanzar gases lacrimógenos para controlar a una “multitud hostil” que atacaba una estación de policía en la capital Puerto Príncipe el domingo.
Testigos dijeron a The Associated Press que varios periodistas, incluido Vilsaint quien trabajaba para la estación de radio Génération 80— se congregaron afuera de la comisaría en Delmas para exigir la liberación de su colega Robest Dimanche, quien fue detenido mientras cubría una protesta el domingo. Dimanche trabaja en Radio Tele Zenith.
La Asociación de Periodistas Haitianos también acusó a la policía de golpear a varios periodistas y confiscar su equipo y otras pertenencias, y los llamó “actos de represión antidemocráticos”.
“La seguridad de los medios y la libre circulación de los periodistas son esenciales para el pleno y completo disfrute de la libertad de prensa, la libertad de pensamiento, la libertad de expresión y el derecho a la información que conforman la democracia”, dijo la asociación.
SIP eleva condena
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) reaccionó con una “profunda condena” por el asesinato del comunicador, el séptimo en lo que va del año en el país caribeño, que sigue a México en posición de peligrosidad para el trabajo de la prensa.
La organización, que aglutina a cientos de medios de comunicación del continente, ha pedido a las autoridades haitianas una profunda investigación y castigar a los responsables.
La ONU condena los ataques
La misión de la ONU en Haití (BINUH, por sus siglas en inglés) también condenó los asesinatos del viernes de Éric Jean Baptiste, líder político del país y excandidato a la presidencia, junto a su guardaespaldas.
La Misión hizo un llamado a la rendición de cuentas por estos crímenes y agregó que Jean Baptiste era un político comprometido con el servicio de la consolidación de la democracia y el estado de derecho en Haití.
Los funcionarios de la ONU en la isla también pidieron responsabilidad "por otros delitos graves cometidos recientemente", citando los casos del asesinato de Tess Gary, periodista de Radio LeBon, hallado muerto en Les Cayes el 24 de octubre, y el intento de asesinato de otro periodista, Roberson Alphonse, que trabajaba para Le Nouvelliste. Este último intento tuvo lugar el 25 de octubre.
"Sumamos nuestra voz a la de nuestros colegas en Haití para ofrecer nuestras condolencias a las familias de los asesinados y al pueblo haitiano. Deseamos una pronta y completa recuperación al periodista herido", dijo la ONU el lunes.
[La periodista Margaret Besheer, corresponsal de VOA ante la ONU, contribuyó con este reporte. Con información de Associated Press]
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