Western Union reanudó los servicios a Cuba en una fase de prueba que permitirá transferencias de dinero a la isla, por primera vez desde que el gobierno del expresidente Donald Trump impulsó restricciones en 2020 para presionar a las autoridades de La Habana.
La fase de prueba comenzó el miércoles en algunos de los establecimientos de la compañía de Miami, y se pueden enviar transferencias a tres bancos operados por el gobierno en Cuba: el Banco Popular de Ahorro, el Banco Metropolitano SA y el Banco de Crédito y Comercio.
Western Union dijo que los pagos no pueden ser enviados por internet, una alternativa que es ampliamente utilizada, y que el dinero sólo puede ser transferido en dólares. Los pagos también están limitados a 2.000 dólares al día, y el dinero debe ser recogido presentando una identificación cubana.
"Es un gran placer anunciar la reanudación de nuestras operaciones en Cuba con una fase de prueba inicial", indicó Gabriella Fitzgerald, presidenta de Western Union Norteamérica.
“La cercana relación entre nuestros clientes estadounidenses y sus familiares que viven en Cuba, junto con el papel que nuestros servicios desempeñan para ayudar a crear mejores vidas, están inextricablemente vinculados”, agregó.
Las remesas han sido durante mucho tiempo una fuente de ingreso crucial para las familias cubanas, pero la necesidad se ha agudizado en momentos en la medida que se profundiza la crisis económica y social.
Las sanciones impuestas durante el gobierno de Trump limitaron las transferencias tradicionales, lo que llevó a una mayor dependencia de los servicios informales de cambio de dinero que normalmente llevan en efectivo personas que viajan al país. Esos envíos a menudo conllevan tarifas elevadas e implican más riesgo.
El gobierno de Biden ha eliminado algunas de las restricciones hacia Cuba, entre ellas las remesas, pero otras se mantienen vigentes.
Western Union no dio más detalles en su declaración del miércoles sobre los canales que usaría para transferir dinero a La Habana.
El año pasado, Washington también eliminó un límite trimestral de 1.000 dólares a las remesas familiares de los ciudadanos cubanos y permitió que los estadounidenses viajaran una vez más a Cuba en programas educativos organizados por compañías o grupos de viajes Estados Unidos.
[Con información de Reuters y AP]
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