El aumento de la violencia armada, las enfermedades y la desestabilidad política son los principales motivos por los que la Organización de las Naciones Unidas continúa insistiendo en una intervención internacional en Haití.
Citando la Resolución 2653 del Consejo de Seguridad de la ONU del 21 de octubre y el pedido de un grupo diverso de la sociedad civil -incluidos representantes de la diáspora-, la enviada especial Helen La Lime sugirió el martes que el organismo debiera aprobar el despliegue de un contingente internacional para la isla caribeña.
“La realidad es que sin este despliegue internacional, operando de manera integrada con la Policía Nacional de Haití (HNP, por sus siglas en inglés), los muy positivos efectos del proceso político y las sanciones hasta el momento seguirán siendo frágiles y vulnerables a ser revertidos”, indicó.
Frente al llamado de La Lime, una parte significativa de la sociedad civil pidió en noviembre de 2022, en una carta al presidente Joe Biden, que no enviara tropas a Haití.
La violencia en Haití subió de tono en septiembre de 2022, cuando el gobierno decretó la suspensión de los subsidios a los precios de los combustibles, lo que trajo la repulsa popular, pero también la acción de las pandillas, cuyo núcleo más fuerte bloqueó el principal puerto del país hasta crear una grave crisis.
La Lime, quien como enviada especial en Haití ha trabajado de cerca con el gobierno y entidades internacionales de ayuda, elogió no obstante el avance del "Acuerdo de Consenso Nacional para una Transición Inclusiva y Elecciones Transparentes".
El Consenso, manifestó, ha marcado 2024 como la fecha para instalar un gobierno electo, promover reformas fiscales y otras medidas de carácter económico.
En su informe, La Lime dijo que la violencia por parte de las pandillas ha aumentado el número de asesinatos y secuestros por cuarto año consecutivo. Al punto que los 1.359 secuestros en 2022 son el doble de lo ocurrido en el año anterior.
“Los asesinatos también aumentaron en un tercio desde el año anterior. Se reportaron un total de 2.183 en 2022, afectando a casi todos los segmentos de la sociedad, incluido un excandidato presidencial y al director de la Academia Nacional de Policía”, apuntó.
La ONU, de conjunto con Estados Unidos y Canadá, ha impuesto sanciones a los principales líderes de pandillas, miembros y exmiembros del gobierno, así como del Senado, en relación con actos de corrupción.
Haití vivió su peor momento de inestabilidad en años cuando el 7 de julio de 2021 el presidente Jovenel Moise fue asesinado en su residencia de Puerto Príncipe, acción por la cual han sido detenidos y acusados varios miembros de un grupo internacional.
EEUU y el FMI acuden en apoyo
En otro tanto, la administradora adjunta de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Isobel Coleman, llegó a la capital haitiana este martes para una visita de dos días, coincidiendo con el anuncio de un paquete adicional de 56,5 millones de dólares en apoyo a ese país.
"Esta financiación ayudará a los socios a satisfacer las necesidades humanitarias urgentes de más de 868.800 personas en todo Haití mediante la distribución de suministros médicos y medicamentos, la mejora del acceso al agua potable y el refuerzo de las operaciones de los centros de salud, incluidos los centros de tratamiento del cólera, fundamentales para frenar la propagación de la peligrosa enfermedad", informó el USAID en un comunicado.
Coleman “destacará cómo el USAID está ayudando a aliviar las necesidades humanitarias, combatir el cólera y promover la democracia y la estabilidad económica en Haití”, adelantó la agencia.
La funcionaria se reunirá además con altos cargos del gobierno y representantes de la ONU para ventilar el trabajo conjunto para aliviar la crisis.
Igualmente, la junta ejecutiva del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó 105 millones de dólares para ayudar a Haití a abordar la grave inseguridad alimentaria, reportó Reuters citando fuentes de la institución.
"La inflación de precios récord empeoró la fragilidad de Haití y agravó el sufrimiento de la población haitiana, que ya estaba afectada por una desnutrición severa", dijo la subdirectora general, Antoinette Sayeh, señalando los "derivados" de la invasión rusa de Ucrania a principios del año pasado.
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