La delegación de paz de la guerrilla Ejército de Liberación Nacional instó el jueves al gobierno colombiano a continuar las negociaciones de paz luego de un ataque con explosivos en el que murieron nueve militares y otros nueve resultaron heridos.
“Entendemos el dolor porque lo hemos sentido. Todos los dolores cuentan, son iguales", indicó el ELN en Twitter sin reivindicar el ataque. Añadió que "son duras las realidades de la guerra, por ello es menester persistir en la construcción de la paz y proseguir en su proceso”.
Los militares fueron atacados la madrugada del miércoles con explosivos y armas de largo alcance cuando realizaban operaciones de seguridad en un oleoducto de la estatal Ecopetrol ubicado en la zona rural del municipio de El Carmen, en Norte de Santander, fronterizo con Venezuela. Ocho de los militares heridos se encuentran en recuperación en un hospital y uno de ellos tiene pronóstico reservado.
El ejército señaló al ELN, considerada la última guerrilla activa en el país, como responsable del ataque, pese a que los militares no se encontraban en operaciones ofensivas contra ese grupo armado.
El ataque podría complicar los esfuerzos del presidente Gustavo Petro de alcanzar la “paz total”. Petro citó para el próximo lunes una reunión de emergencia con la delegación de paz del gobierno en el proceso con el ELN para evaluar las acciones a seguir.
Otty Patiño, jefe de la delegación de paz del gobierno, dijo el jueves que van a continuar buscando la paz con los armados. "No seremos nosotros los que nos pararemos de la mesa de negociación”. Sin embargo, agregó que “entre más acciones militares y hostigamientos hagan, la voz de los delegados va a ser menos confiable”.
El proceso de negociación con el ELN se reanudó en noviembre del año pasado con la llegada al poder de Petro, el primer presidente de izquierda en el país, luego de estar suspendido durante tres años a causa de un ataque con explosivos que cobró la vida de 22 personas en una escuela de policías en Bogotá, cuya autoría reconoció la guerrilla.
El actual proceso de negociación ha tenido dos rondas en las que las partes avanzaron en la definición de la hoja de ruta que van a seguir los diálogos y en un proyecto para incluir a las comunidades de territorios afectados por el conflicto para llevarles “alivios humanitarios”. Sin embargo, resta la definición de un cese del fuego bilateral que ha sido pedido por el gobierno y que se empezó a discutir en la mesa de negociaciones para que sea temporal, nacional y verificado. La tercera comenzará en Cuba en las próximas semanas.
Tras el ataque a los militares Patiño aseguró que la exigencia de un cese del fuego y de hostilidades se hace prioritaria como condición para que la sociedad civil pueda participar en el proceso de negociaciones, uno de los puntos claves de la agenda. También señaló que el ELN ha incrementado en los últimos días el hostigamiento a la población civil en los departamentos de Cauca, Arauca, Chocó y Nariño.
El ELN fue fundado en 1964 inspirado en la revolución cubana y desde entonces se ha sentado a negociar en seis oportunidades con el Estado sin éxito. Actualmente tiene presencia en más de 200 municipios y podría tener entre 2.000 y 4.000 integrantes en sus filas, según las autoridades.
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