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La reacción a la acusación de Trump ilustra una fuerte división en EEUU


Dos mujeres muestran su apoyo al expresidente Donald Trump después de que se conociera la noticia de que un gran jurado de Manhattan lo había acusado formalmente el 30 de marzo de 2023, cerca de la propiedad Mar-a-Lago de Trump, en Palm Beach, Florida.
Dos mujeres muestran su apoyo al expresidente Donald Trump después de que se conociera la noticia de que un gran jurado de Manhattan lo había acusado formalmente el 30 de marzo de 2023, cerca de la propiedad Mar-a-Lago de Trump, en Palm Beach, Florida.

Demócratas y republicanos contraponen sus puntos de vista ante la acusación formal al expresidente Trrump. El hecho deja ver la profunda división política en EEUU.

La reacción a la presentación de cargos contra Donald Trump, la primera de un expresidente de Estados Unidos, era predecible en el actual caldo de cultivo de la divisiva política estadounidense. Sus compañeros republicanos atacaron al fiscal por lo que afirmaron que es una acción puramente partidista, mientras que los demócratas sostuvieron que nadie debería estar por encima de la ley.

Incluso los republicanos que buscan imponerse a Trump de cara a la candidatura de su partido para las presidenciales de 2024 salieron en su defensa después de que un gran jurado de Nueva York acusara a Trump de cargos relacionados con un pago de 130.000 dólares en efectivo en 2016 a una actriz de cine para adultos para que guardara silencio sobre una supuesta aventura una década antes. Trump ha negado durante mucho tiempo la afirmación de la estrella porno Stormy Daniels.

Las críticas tras el anuncio

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien no ha anunciado una candidatura presidencial para 2024, pero no obstante ocupa el segundo lugar detrás de Trump en las encuestas a nivel nacional sobre la nominación, acusó en Twitter al fiscal general de Nueva York, el demócrata Alvin Bragg, de retorcer sistema legal “para promover una agenda política” que, dijo, “pone patas arriba el Estado de derecho”.

DeSantis dijo que no cooperaría con las autoridades de Nueva York para extraditar a Trump desde Florida, aunque puede que no sea un problema en ningún caso. El abogado de Trump ha dicho que el expresidente volará a Nueva York para entregarse.

Nikki Haley, exembajadora de Trump ante las Naciones Unidas, quien ya anunció su candidatura a la presidencia en 2024, dijo sobre la acusación: “Se trata más de venganza que de justicia”.

Mike Pompeo, secretario de Estado durante la administración de Trump y otro posible candidato presidencial, acusó al fiscal de “hacer política”.

El senador republicano de Carolina del Sur, Tim Scott, otro posible candidato, dijo en un comunicado: “Este fiscal de distrito procriminal de Nueva York no ha respetado la ley para los delincuentes violentos, pero utilizó la ley como arma contra los enemigos políticos. Esto es una parodia, y no debería estar sucediendo en el mejor país de la Tierra”.

Punto de vista de la oposición

Los adversarios demócratas de larga data de Trump tomaron un rumbo diferente, diciendo que nadie debería poder escapar de ser procesado si existen sospechas de irregularidades y que, en cualquier caso, el exmandatario podrá así rebatir los cargos ante el tribunal.

Nancy Pelosi, expresidenta de la Cámara de Representantes, escribió en Twitter: “El gran jurado ha actuado en base a los hechos y la ley. Nadie está por encima de la ley, y toda persona tiene derecho a un juicio para probar su inocencia”. “Ojalá el expresidente respete pacíficamente el sistema, que le otorga ese derecho”, agregó.

El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, dijo en un comunicado: “El señor Trump está sujeto a las mismas leyes que todos los estadounidenses. Podrá valerse del sistema legal y de un jurado, no de la política, para determinar su destino de acuerdo con los hechos y la ley. No debe haber influencia política externa, intimidación o interferencia en el caso”.

Las reacciones a la noticia en las calles de Nueva York fueron mixtas.

"Finalmente. Debería haber sido acusado de un millón de cosas y finalmente está siendo acusado de algo. ¡Ya es hora!", decía Caroline, residente de Nueva York.

Otro residente de Nueva York llamado Oscar dijo que cree que la acusación ayudará a la candidatura de reelección de Trump. “Esto es probablemente lo que quieren: la campaña de Trump quiere esto. Es marketing gratuito. Él va a estar ahí fuera. Si gana, ¡hey, gané! ¡Vota por mí!".

James, de Connecticut, consideró que cree que la acusación fortalece el Estado de derecho. “Creo que esta acusación demuestra que vivimos en una sociedad civil y que nadie está por encima de la ley. Y con suerte, si cometió delitos, entonces será responsable de eso”, dijo.

Steve, un residente de Chicago, tenía un punto de vista diferente. “Creo que es una acusación tonta. Estados Unidos puede dedicar más tiempo a cosas más importantes que perseguir a una rata por la cocina, que realmente no es una rata, es una persona que ha hecho mucho por este país”.

[Parte del material de este informe proviene de The Associated Press]

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