La secretaria de relaciones exteriores de México, Alicia Bárcena, aseguró este viernes que la cuestión migratoria es una prioridad para el gobierno de Andrés Manuel López Obrador debido al aumento de migrantes en los últimos meses.
“Nos está llegando mucha gente desde el Tapón del Darién, alrededor de 3.000 personas al día. Y por la frontera sur nos llegan 6.000 que se van sumando con Honduras, Guatemala, etcétera", informó Bárcena durante una conferencia de prensa en la sede de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York.
"A la frontera norte están llegando 8.000 y esto rebasa cualquier capacidad por más que México quiera hacer un buen trabajo”, añadió.
En ese sentido, advirtió que la situación también es complicada para las autoridades fronterizas de Estados Unidos ya que “ellos tienen la capacidad para procesar mil [migrantes] al día y si llegan 11.000 es muy difícil”.
La mediación de ACNUR y OIM
Ante este escenario, representantes del gobierno mexicano se han reunido con Filippo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), y con Amy Pope, que a partir del 1 de octubre ocupará el puesto de directora de la Organización Internacional de Migración (OIM), con el objetivo de buscar soluciones para minimizar el impacto de las migraciones en la región.
“Con la OIM estamos trabajando muy bien porque estamos haciendo un censo dentro de México y estamos tratando de realmente hacer una política muy apegada a los derechos humanos, muy apegada a la protección humanitaria de los migrantes”, manifestó la canciller mexicana insistiendo en que “son grandes cantidades de migrantes de nacionalidades muy específicas”.
Es por ello que, a su parecer, es necesario analizar “las causas estructurales de la migración” con tal de encontrar soluciones mucho más efectivas al respecto.
“Hay que tener una visión no solamente de la movilidad desde la perspectiva de cuántos flujos pasan sino también de cómo vamos a las causas estructurales de migración, cómo vamos a los países de origen para ofrecer también algunas alternativas de desarrollo, y ahí trabajamos con El Salvador, Guatemala, Honduras, Cuba y hemos tratado de entrar a Haití, no ha sido fácil pero en eso estamos”, detalló.
Además, celebró que las políticas migratorias que se han estado llevando a cabo en los últimos meses en México están dando resultado, a pesar de las dificultades.
“Tenemos un centro llamado Comar que procesa solicitudes de refugio. Hemos logrado procesar solicitudes muy importantes, aunque también hay capacidad rebasada en ese sentido”, agregó Bárcena recordando que las personas que son aceptadas por el país entran en un programa diseñado para buscar empleo y establecerse legalmente.
Próxima reunión entre López Obrador y Biden
Con el objetivo de aliviar el impacto del aumento de migrantes, la secretaria de relaciones exteriores confirmó que está previsto que el presidente mexicano se reúna, a principios de noviembre, con su homólogo estadounidense, Joe Biden, para “discutir específicamente la migración y el desarrollo”.
“Vamos a abordar los caminos legales que ya existen, como el parole humanitario que ha llevado a más de 400.000 personas a Estados Unidos. También vamos a analizar el CBP One, que es una plataforma para que las personas participen y soliciten asilo en Estados Unidos, y luego vamos a hablar de las visas de trabajo, como la H-2A, que es para agricultura, y la H-2B, para actividades no agricultoras”, expuso.
En la reunión también se abordarán esas causas que obligan a muchos migrantes a abandonar sus países en busca de una vida mejor. “Queremos hablar de los siete países cuyos nacionales migran más hacia México, que son Ecuador, Colombia, Haití, Cuba, Venezuela, Guatemala y Honduras”, añadió.
Encuentros con Panamá para hablar del Tapón de Darién
Con motivo de la celebración de la 78ª Asamblea General de la ONU, la delegación mexicana también ha podido reunirse con representantes de Panamá para analizar en profundidad sobre el tema migratorio ya que el país centroamericano es un lugar clave por la peligrosa selva del Darién, donde pasan miles de migrantes diariamente.
“Panamá es fundamental para nosotros porque el Tapón de Darién está en Panamá, entonces si podemos tener una política articulada entre Colombia, Panamá, Costa Rica, Guatemala y Honduras para ayudar y aconsejar a los migrantes cuando pasan por el Tapón de Darién, que tienen enormes problemas de sobrevivencia”, subrayó.