El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, fustigó a Israel el domingo, afirmando que “el horror y el hambre acechan al pueblo de Gaza” y que sólo Israel puede remover los obstáculos para llevar más ayuda al enclave palestino.
"Déjenme ser claro. Nada justifica los abominables ataques de Hamás del 7 de octubre y la toma de rehenes en Israel”, dijo el jefe de la ONU en una visita a El Cairo para reunirse con funcionarios egipcios y presionar por un alto el fuego en la guerra de seis meses entre Israel y Hamás.
"Pero nada justifica el castigo colectivo del pueblo palestino", afirmó.
En una visita el sábado al cruce de Rafah de Gaza con Egipto, Guterres dijo que era un “escándalo moral” que se esté bloqueando el envío de ayuda a Gaza.
“Desde este paso fronterizo, vemos la angustia y la crueldad de todo esto. Una larga fila de camiones de ayuda bloqueados a un lado de las puertas, la larga sombra del hambre al otro”, dijo Guterres.
Dijo que la única forma eficaz y eficiente de entregar argamento pesado a Gaza es por carretera e incluye un aumento exponencial de las entregas comerciales. Dijo que en Egipto "el asalto diario a la dignidad humana de los palestinos está creando una crisis de credibilidad para la comunidad internacional".
El funcionario hizo estos comentarios mientras se libraban intensos combates en Gaza el domingo, con Israel prometiendo continuar con su incursión terrestre en el extremo sur del territorio, cerca de Rafah, a pesar de las objeciones de Estados Unidos y las conversaciones de tregua en curso en Qatar.
Pero Israel no ha lanzado un ataque a gran escala contra el extremo sur de Gaza aún. Varios de sus estrategas de guerra, incluido el ministro de Defensa, Yoav Gallant, se dirigían a Washington para mantener conversaciones esta semana mientras funcionarios estadounidenses intentan evitar un mayor derramamiento de sangre en una región donde más de un millón de palestinos se refugian en tiendas de campaña improvisadas.
Washington ha dejado claro que no apoyará un ataque israelí contra Rafah sin un plan para proteger a los civiles allí, pero Israel no ha dicho adónde trasladaría a los palestinos.
La mayoría de los refugiados fueron empujados hasta allí por órdenes de las fuerzas israelíes, que les dijeron que abandonaran sus hogares en el norte de Gaza mientras las tropas israelíes avanzaban allí en las primeras etapas de la guerra.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha sostenido que "no tenemos forma de derrotar a Hamás sin entrar en Rafah y eliminar los batallones que quedan allí".
El líder israelí dijo al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, durante una reunión el viernes en Israel: “Espero hacerlo con el apoyo de Estados Unidos, pero si es necesario, lo haremos solos”.
El Ministerio de Salud de Gaza gobernado por Hamás dijo que otras 84 personas habían muerto durante el último día, elevando el número total de muertos en la guerra a 32.226, una cifra que incluye a los combatientes de Hamás que Israel ha matado.
La guerra comenzó con el ataque terrorista de Hamás contra Israel el 7 de octubre, que mató a 1.200 personas y condujo a la captura de unos 250 rehenes, unos 100 de los cuales los militantes todavía retienen en Gaza.
Los negociadores israelíes y Hamás en Qatar aún no han llegado a un pacto de alto el fuego.
El viernes, el Consejo de Seguridad de la ONU no logró aprobar una resolución para un alto el fuego inmediato en Gaza después de que Rusia y China vetaron la propuesta redactada por Estados Unidos. Esta fue la séptima vez que el consejo no logró llegar a un acuerdo.
El lunes por la mañana se celebrará una nueva votación en el Consejo de Seguridad sobre una alternativa de alto el fuego.
Los combates han estallado durante casi una semana en y alrededor del mayor complejo hospitalario de Gaza, Shifa en la ciudad de Gaza, que ha sido un refugio para pacientes y desplazados. También es una instalación donde Israel dice que se han estado escondiendo militantes del grupo Hamás y la Jihad Islámica. Hamás es considerado grupo terrorista por Estados Unidos.
En Israel, familiares y partidarios de los rehenes se manifestaron el sábado frente al Ministerio de Defensa en Tel Aviv, exigiendo mayores esfuerzos para traerlos a casa. Se produjeron algunos enfrentamientos entre los manifestantes y la policía.
[Parte de esta información provino de Reuters, Associated Press y France Press]
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