Un fuerte vendaval y un mar agitado cerca de la costa noroeste de España ha empujado hacia la costa más petróleo de un hundido y han forzado a detener las labores de limpieza.
Las autoridades inspeccionaron cientos de kilómetros de la costa contaminada con residuos de petróleo, mientras soldados y pescadores usan palas de mano en un intento por limpiar las manchas ocasionadas por el buque petrolero Prestige.
Los vientos alcanzaron 100 kilómetros por hoara el jueves, y los meteorólogos predicen la continuación de condiciones de tormentas.
Al menos 10 toneladas de crudo se derramaron cuando un envejecido buque tanque se partió en dos y se hundió en medio de mal tiempo el martes. Unas 60 toneladas de petróleo se hundieron con el barco.