Más de mil familiares de reclusos en Venezuela optaron por encerrarse en tres cárceles del país, para exigir mejores condiciones de vida en los penales y celeridad en los procesos judiciales de sus seres queridos.
Según las autoridades, el incidente ocurrió el domingo cuando familiares de los presos llegaron a las cárceles de Coro, Rodeo y Tocuyito al oeste de Caracas, durante las horas normales de visita, y luego protagonizaron una protesta para que fueran escuchadas sus demandas.
Aun no está claro si las protestas en los tres centros penales fueron planeadas o coordinadas.
El incidente ocurrió varios días después de que 11 reclusos murieron y 40 resultaron heridos durante un violento motín entre pandillas rivales registrado en la prisión de máxima seguridad de Yare, en el centro del país.
Las autoridades penales tuvieron que llamar a la Guardia Nacional para restaurar el orden.