La afirmación del gobierno afgano de que el fugitivo líder del Talibán mulá Omar murió hace dos años está generando serias dudas sobre si continuarán las conversaciones entre Kabul y el Talibán.
Un portavoz del Talibán emitió una declaración en un mensaje electrónico el jueves, diciendo que la oficina política del grupo en Doha, Qatar, no está al tanto de ningunas conversaciones de paz legítimas en Pakistán o China.
El presidente afgano, Ashraf Ghani, pidió a todos los grupos armados de oposición que aprovechen la oportunidad para unirse al proceso de paz. Pero la muerte del mulá Omar deja sin un líder que represente al movimiento insurgente que durante largo tiempo ha estado inclinado a luchas entre facciones.
El Talibán no ha confirmado la muerte del mulá Omar, quien ha sido el comandante supremo y líder espiritual de Afganistán por más de una década.
