Más de 50 oficiales de gendarmería allanaron sorpresivamente el edificio central de la Empresa Cablevisión, la operadora más importante de Argentina, perteneciente al Grupo Clarín.
El allanamiento duró tres horas y se realizó por orden de un juez de Mendoza, en cuya provincia no opera dicho canal.
El abogado Ricardo Mastronardi, asesor de la intervención, ratificó el procedimiento.
“Esto es una medida judicial que tiende a la protección del derecho del consumidor, a la protección de los derechos generales, y realmente es una vergüenza que los directivos o los funcionarios de Cablevisión hayan hecho bajar o los genialistas, la idea de pérdida de trabajo”, señaló el abogado.
Los efectivos llegaron a la empresa acompañados por cámaras de televisión de medios oficialistas y se fueron cuando los abogados de Cablevisión les recriminaron que no tenían jurisdicción para el allanamiento. Mientras, los empleados se mostraron indignados.
“Uno se sorprende porque estás trabajando en tu ámbito laboral y de repente te encontras con gente de gendarmería que no sabés que pasa. Incertidumbre, preocupación, un momento raro, un momento difícil”, dijo un empleado.
La denuncia de la Empresa Supercanal del Grupo Vila-Manzano, afín al gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, pretende anular una fusión entre Cablevisión y Multicanal, aclaró Carlos Moltini, Gerente de la empresa.
Según expertos, el hecho se da en el marco de una agudización de los ataques del gobierno al Grupo Clarín por criticar sus políticas y formas de gobierno.
