El presidente brasileño Jair Bolsonaro estaba entre los aliados ideológicos más vocales del expresidente Donald Trump cuando éste ocupaba el cargo. Ahora, con el presidente Joe Biden en la Casa Blanca, muchos en Brasil esperan cambios que algunos temen y otros acogen con satisfacción.
El ascenso de Bolsonaro a la presidencia en 2019 trajo grandes cambios para la política exterior brasileña. Su apretón de manos con Trump señaló la decisión de Brasil de convertir a Estados Unidos en un aliado clave.
"La relación entre Bolsonaro y Trump podría haber parecido un poco caricaturesca desde el exterior, pero representó un cambio de paradigma. Durante casi dos décadas, Brasil experimentó distantes relaciones con Estados Unidos. No fue solo una cuestión de simpatía y amistad, sino que en los últimos dos años, las relaciones comerciales entre los dos países han mejorado y han hecho que esta alianza sea significativa", explicó a la Voz de América el politólogo Christian Lohbauer.
En los últimos días de Trump en el cargo, ambos países firmaron un pacto comercial para reducir los aranceles a las exportaciones y Washington ofreció inversiones a Brasilia para financiar la tecnología 5G en todo el país.
Estados Unidos es el segundo socio comercial más importante de Brasil. Pero a pesar de la mejoría de los lazos, el comercio entre los dos países se redujo a 49 millones de dólares el año pasado, el nivel más bajo en 11 años debido a la pandemia del coronavirus,
Bajo la política de Trump de “Estados Unidos primero”, Washington también impuso aranceles al acero y aluminio brasileños.
El recargo sobre el acero, el aluminio; todo esto contradecía los intereses brasileños"
Rubens Barbosa, exembajador de Brasil ante EE. UU.
Rubens Barbosa, ex embajador de Brasil ante Estados Unidos, opina que la política de Trump sobre el acero y aluminio brasileños debería continuar. “El recargo sobre el acero, el aluminio; todo esto contradecía los intereses brasileños. Y durante el gobierno de Biden es un comportamiento que debe continuar. Estados Unidos debe reforzar esta postura y Brasil debe hacer lo mismo ”, dijo Barbosa a la VOA.
Por otro lado, el énfasis del presidente Biden en las cuestiones ambientales y de cambio climático durante su campaña puso rumbo a una inevitable colisión con los intereses de la presidencia brasileña.
Biden ha criticado a Brasil por el aumento de incendios forestales y la deforestación de la Amazonía. La respuesta de Bolsonaro ha sido enojada, incluso amenazando con iniciar un conflicto si la diplomacia no funciona.
"Cuando te quedas sin saliva, tienes que tener pólvora. De lo contrario, no funcionará. Ni siquiera tienes que usar pólvora, pero debes saber que la tienes ", dijo el presidente Bolsonaro, al canal TV Brasil.
Pocos creen que esto sucederá, pero los analistas dicen que Bolsonaro corre el riesgo de dañar las relaciones con Washington si no suaviza su discurso.
"El problema para Brasil, sin embargo, es que no hay muchas opciones. Brasil corre el riesgo de quedar aislado en el mundo (...). La administración deberá presentarse en términos de compromiso ambiental hasta fin de año”, dijo a la Voz de América, Vinicius Rodrigues, especialista brasileño en relaciones exteriores.
Desde que Bolsonaro asumió la presidencia, ha negado que la Amazonía esté siendo deforestada. El mandatario brasileño envió una carta a la Administración Biden, ofreciendo discutir nuevas políticas para el Amazonas. Pero la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo a los reporteros que Brasil no será una prioridad en los primeros años de la nueva administración.
