El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, nombró el lunes (15 de marzo) a un médico como nuevo ministro de Salud del país, horas después de que el general que actualmente ocupa el cargo confirmara que Bolsonaro estaba sopesando candidatos para reemplazarlo.
Marcelo Queiroga, un cardiólogo, reemplazará al general Eduardo Pazuello y se convertirá en el cuarto ministro de salud de Brasil desde el inicio de la pandemia de coronavirus.
El trabajo de Pazuello estaba en juego después de una semana en la que se registraron muertes récord por COVID-19 en Brasil. Más de 279.000 brasileños han muerto en un brote cada vez más grave que mató a más personas en Brasil que en cualquier otro país la semana pasada.
Bolsonaro dijo a los periodistas que Queiroga seguiría la agenda de Pazuello en el Ministerio de Salud y que el gobierno redoblaría los esfuerzos para implementar vacunas masivas contra el coronavirus. Añadió que la transición tardaría una o dos semanas en completarse. El mandatario hizo el anuncio en su cuenta de Twitter.
"- Este lunes invité al actual presidente de la Sociedad Brasileña de Cardiología (SBC), Marcelo Queiroga, a asumir el cargo de ministro de salud", escribió el mandatario.
Pazuello, un general del Ejército en servicio activo sin título médico, ha sido criticado por carecer de experiencia en salud pública y apoyar el impulso de Bolsonaro de usar medicamentos no probados para combatir el COVID-19, al tiempo que minimizaba la necesidad de distanciamiento social.
Los dos predecesores de Pazuello dimitieron en aproximadamente un mes el año pasado, en parte porque, como médicos, no respaldaban por completo el tratamiento de pacientes con COVID-19 con el fármaco antipalúdico hidroxicloroquina.
Pazuello amplió el acceso a la hidroxicloroquina y permitió que se la recete a prácticamente cualquier persona que dé positivo por el coronavirus. Los reguladores en otros lugares han dicho que es poco probable que la hidroxicloroquina sea eficaz para ese propósito y han advertido contra su uso.
Brasil también ha sido más lento que muchos otros países en implementar la vacuna. Ha administrado suficiente vacuna hasta ahora para cubrir alrededor del 2,7% de la población, según datos de Reuters.
El hecho de que Pazuello no haya asegurado el suministro oportuno de vacunas para el país ha provocado que se solicite una investigación en el Congreso, mientras la Corte Suprema investiga su manejo de la pandemia de COVID-19 en la ciudad norteña de Manaos, que se quedó sin oxígeno.
Con información de Reuters