El canciller de Ecuador, José Valencia, asegura que por el momento no es posible retornar a los migrantes venezolanos que están pidiendo ayuda para regresar a su país, debido a las restricciones a la movilidad que se han implementado para el control de la pandemia en el país. En entrevista con la Voz de América, el canciller Valencia también se refirió al plan de apertura de la actividad económica en Ecuador, que ya no podrá depender de la renta petrolera, y explicó los protocolos para la reactivación de los vuelos internacionales y domésticos.
Pregunta: ¿Cómo están abordando el control del coronavirus en su país?
Respuesta: Gracias por la invitación a la Voz de América. En este momento la situación en el Ecuador se encuentra mucho más bajo control de lo que ocurría en el pasado. Todavía no ha pasado completamente la pandemia. Ya sabemos que es la situación de casi todos los países latinoamericanos por tanto no hay que bajar la guardia, pero, por lo pronto, en la provincia del Guayas, en la ciudad de Guayaquil, donde más se sintió el impacto inicial, el asunto se ha controlado sustantivamente. El número de personas fallecidas afortunadamente ha bajado, también el número de contagios reportados. A la par que el Gobierno nacional ha incrementado también el número test, la acción de la sanidad pública y también la información general entre la población a fin de que sepan cómo controlar esta situación y por lo menos conducirse a futuro habida cuenta de las circunstancias.
P: En la ciudad de Quito, leía que la ocupación de los hospitales ya estaba sobre el 80%, con esta perspectiva ¿ustedes tienen todavía el plan de reabrir la economía eventualmente el primero de junio?¿cómo está manejando sus calendarios?
R: Sí, se ha registrado un repunte en la situación de contagios y de personas que han fallecido en la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito. No es ni mucho menos el mismo caso, la misma situación dramática que se vivió en Guayaquil. Es una buena noticia, pero aún así, no se puede, como lo decía hace un momento, bajar la guardia. En cuanto a la apertura al proceso de apertura que el Gobierno nacional a través de este comité de operaciones de emergencia que dirige a nivel nacional la estrategia del Gobierno frente al COVID-19. Tenemos un plan que va a diferenciar las situaciones por provincia, por región del país, incluso por cantón, que es cada municipalidad de nuestro país, es nuestra organización política local.
La idea es que haya tres fases y que, para pasar de una a otra, se deban cumplir ciertos requerimientos, ciertos indicadores de la epidemia que justifiquen el paso de una fase en rojo -que es la fase donde más distanciamiento social cuarentena existe- a una fase en amarillo, en la cual se va a permitir una serie de actividades que antes no estaban elaboradas. En la fase ulterior, la fase verde, habrá una mayor apertura social, un mayor intercambio comercial, etc. En este momento la mayor parte del país está todavía aún bajo la fase roja, aunque algunas provincias y cantones ya han presentado su planteamiento, su caso para que sean considerados de moverse a la fase amarilla de la situación.
P: Señor canciller, el tema de los aeropuertos, la reapertura ¿cómo se haría? ¿cuál sería ese protocolo que Ecuador planea implementar?
R: Hemos adoptado como una fecha como un horizonte para una decisión en tal sentido para la reapertura de vuelos tanto internacionales, como internos, para el uno de junio, es decir en unas dos semanas más aproximadamente. Sin embargo, hemos sido muy claros, esta fecha eventualmente se puede revertir. Si hay circunstancias, hay indicadores que lo justifiquen. En todo caso de lo que nosotros tenemos, previsto es que ese día, el primero de junio, se reabrirá vuelos internacionales y también vuelos locales.
Se aplicarán estrictos protocolos de llegada al país, de ingreso de las personas que vengan acá de control y seguimiento una vez que salgan del aeropuerto deberán cumplir también una cuarentena. Son protocolos que prácticamente tienen un alcance universal. Muchos otros países están contemplando que, en el mismo sentido, creemos que va a ser un paso importante para reconectar y volver a una distinta normalidad diría yo, pero que responda a las nuevas circunstancias de la epidemia en lo que respecta al Ecuador.
P: En las conversaciones que han tenido con los países vecinos con los otros cancilleres, ¿qué han hablado sobre temas de cooperación o coordinación en este aspecto del cuidado en las fronteras sobretodo en el caso de Colombia y de Perú?
R: Tenemos una fluida comunicación con las autoridades colombianas con las autoridades peruanas. Los dos países, Colombia y Perú han cerrado sus fronteras aéreas, marítimas, terrestres y fluviales, al igual que el Ecuador. Son protocolos y prácticas comunes a todos los países de nuestra región. Sin embargo, en este diálogo hemos trabajado y abordado asuntos inherentes, por ejemplo, al tráfico de personas en la frontera, a la garantía del tráfico de carga que continúa y continuará durante esta emergencia a coordinaciones también en temas de sanidad pública y de seguridad.
Aunque parezca extraño -a lo mejor ni siquiera extraño, sino que demuestra un poco como son las cosas-, la actividad por ejemplo de grupos irregulares, ilícitos de grupos de crimen transnacional organizado que trafica con narcóticos, ha continuado en esta época; entonces, precisamente también en ese otro tipo de plagas que enfrentan nuestras sociedades, los gobiernos no pueden bajar la guardia, no pueden cruzarse de brazos y nuestra coordinación y cooperación se ha mantenido también en esos dos aspectos.
P: ¿En ese aspecto que menciona, ¿se ha detectado que el narcotráfico ha aumentado?
R: Creo que esa actividad sufrió efectos del distanciamiento social, de la suspensión, por ejemplo, de comunicaciones de tránsito interprovincial en el Ecuador. Pero es un negocio por supuesto impulsado por gente que lo único que busca es su provecho personal y, de lo que se ha visto, han estado de alguna manera reactivando canales que antes no tenían contemplados y para eso está al frente la fuerza pública ecuatoriana.
Ha habido operaciones muy importantes, muy de peso en la Amazonía, por ejemplo, donde incluso se ha detenido a personas que estaban dedicadas a estos negocios ilícitos del narcotráfico e incluso armado, y como ya sabemos toda la parafernalia que acompaña a estos grupos irregulares en la realización de sus ilícitos propósitos.
P: ¿Qué va a pasar con la migración venezolana? Muchos de ellos están buscando la manera de regresar a Venezuela ante las dificultades que están teniendo en sus países los países de acogida para volver a trabajar.
R: Así ha ocurrido en el Ecuador, también en Perú ha habido algunos ciudadanos venezolanos que han querido venir al Ecuador con la intención, han dicho, de llegar a Venezuela. Mire es fruto del impacto de la crisis económica provocada por el coronavirus en nuestras naciones. La economía de nuestros países se ha visto deteriorada. Las proyecciones a futuro no son las mejores, por ponerlo de una manera bastante diplomática si se quiere, pero los números de la CELAC claramente informan sobre un período, años difíciles por delante en lo económico.
Y claro muchos de estos ciudadanos venezolanos habían salido de la crisis económica de su país buscando nuevos horizontes para obtener recursos de trabajo para sus familias y se han topado con esta situación de un deterioro global de la economía por el tema de coronavirus. Están buscando retornar. Nosotros hemos tratado de alguna manera de explicar que eso no es sencillo porque hay normas sanitarias que impiden la libre circulación entre nuestros países. Hay problemas de tránsito también que están sobre la mesa, y desde ese punto de vista hemos llamado sobre todo a que se busque la forma de permanecer en los sitios. Hemos buscados el apoyo de organizaciones internacionales para atender temas humanitarios.
El mismo pedido del Ecuador que brinda a personas con dificultades se extiende en el país, a todas la otras personas, incluso extranjeros, que puedan tenerlas. Estoy pensando, por ejemplo, en la prestación de servicios de salud, en los servicios públicos de salud de ecuatorianos que atiende sin discriminación a ninguna persona. En fin, estamos tratando de organizarnos con respecto a estos temas y esperamos que haya una solución a futuro. Evidentemente si ellos quieren volver a su país, esperamos que de parte de las autoridades del régimen del señor Maduro haya la apertura de recibirnos y de facilitar su llegada en la medida que ellos quieran hacerlo.
P: ¿Se ha planteado con Colombia la creación de algún corredor para facilitar que regresen a Venezuela?
R: Sí hemos conversado de eso con las autoridades colombianas. Nosotros entendemos los puntos de vista de ellas. Por supuesto en este momento, el problema es que no solamente las personas pueden tener este tránsito, este corredor si se quiere hasta la frontera con Venezuela, bien sea en Arauca o Cúcuta, sino además que tengan la facilidad de ingresar a Venezuela. Según nos han explicado, hay un determinado número de personas que pueden entrar diariamente y ese número ralentiza mucho y limita el flujo de personas hacia Venezuela. Entonces desde ese punto de vista entendemos que es un asunto que hay que considerar a futuro en las próximas conversaciones que tengamos con respecto a temas migratorios regionales donde el tema de Venezuela está en primera línea. Ciertamente vamos a continuar trabajando en ese tema. Lo que buscamos es que haya el menor estrés posible para personas que sí están sufriendo la vulnerabilidad inicial de haber salido de su país y que ahora un poco se han encontrado con esta crisis que vino prácticamente de la nada, inesperada.
P: ¿Cómo será esa nueva economía del Ecuador? Una economía en donde el petróleo ya no podrá ser considerado como una de las fuentes de ingreso más importantes.
R: Sí, de hecho en este momento el petróleo ha reducido sustancialmente su aporte a la economía nacional como un ingreso del Estado, como un ingreso del país de divisas. El mercado petrolero está deprimido los precios están bordeando en promedio los 15 dólares e incluso ha bajado mucho más que eso, y esto le hace replantearse mucho futuro. A a un precio del petróleo a 15 dólares para el Ecuador le significa prácticamente un ingreso cero ya que los costos de producción son mayores a esa cifra mayor a los 15 dólares, están en torno a los 20.
El impulso que el Gobierno y Estado ecuatoriano quiere dar a futuro a la agricultura, la diversificación de sus fuentes en exportaciones agrícolas por ejemplo va a ser clave. Va a ser clave y nosotros esperamos que esto se pueda realizar adecuadamente que se puedan llevar a cabo de una manera muy expedita en el futuro. Un cambio que tomará varios años. Ese gran reto que tiene la sociedad ecuatoriana al momento, el reto de lograr articular cambios necesarios y que se necesita urgentemente con procesos que usualmente toman precisamente varios años en desarrollarse, no tenemos otra alternativa.
P: Ustedes ya tomaron una línea de crédito de emergencia con el Fondo Monetario Internacional por esta pandemia. ¿Planean ustedes y ampliar este crédito o hacer unas solicitudes adicionales?
R: Sí, hay un continuo diálogo con las entidades multilaterales, real, que articula la estrategia en ese sentido es nuestro Ministerio de Economía y Finanzas.
Pero lo que buscamos es en primer lugar reunir fondos para estabilizar financieramente al Estado ecuatoriano, para estabilizar a la economía del país, una economía dolarizada, y que por tanto requiere de apoyos especiales; y, en segunda instancia, buscar la manera de que el país a futuro se torne viable con un flujo constante de divisas.
No descartamos que haya procesos de renegociación por ejemplo de la deuda externa con otras naciones. No descartamos también que haya una gestión, una actividad de buscar nuevos mercados para financiar a nuestro país. Hay varias estrategias que el Estado ecuatoriano ha considerado.
P: En el caso del Ecuador, ¿cómo han hecho en esa competencia mundial en la que están todos los países por insumos médicos y respiradores?
R: Bueno sí, hay una gran labor por parte de las autoridades nacionales de buscar precisamente el que este esquema sanitario ecuatoriano cuente adecuadamente de insumos médicos, de medicinas, de trajes de bioseguridad, de una serie de otros requerimientos, que la adecuada atención sanitaria demanda en estos momentos. Hasta este momento, por ejemplo, hemos logrado un importante acceso a pruebas de coronavirus, tanto las pruebas rápidas como las PCR. Hemos logrado tener acceso importante a recursos de medicinas que han ido desarrollando. Sabemos, sin embargo, que la meta del Ecuador y de la comunidad internacional es estar presentes para el momento en que sea factible, que sea posible el desarrollo de una vacuna que a todas luces marcará una gran diferencia a futuro.
No sabemos cuántos meses pueda tomar eso, entretanto seguiremos desplegando todas las medidas sanitarias correspondientes, junto a las medidas de precaución de prevención de distanciamiento social que se han probado que son indispensables para atender esta situación de emergencia sanitaria.