El expresidente peruano y actual candidato al Congreso, Martín Vizcarra, eludió ir a prisión preventiva luego de que un juez rechazara el jueves la solicitud de un fiscal de 18 meses de prisión mientras Vizcarra está siendo investigado por corrupción.
Vizcarra, quien llegó al poder en 2018 tras la renuncia de su antecesor pero fue destituido de su cargo en noviembre por el Congreso, está bajo investigación por supuestamente recibir 622.000 dólares en sobornos de dos empresas que ganaron contratos de obras públicas cuando era autoridad regional hace ocho años.
“Quiero agradecer a millones de peruanos que me han respaldado. Ahora nos dedicaremos con más fuerza a nuestra actividad política. Seguimos en campaña electoral”, dijo Vizcarra a la prensa desde la casa de su abogado tras conocerse la decisión judicial.
En la audiencia, realizada por teleconferencia el mismo día, el expresidente reiteró su inocencia y prometió que no “abandonará el país”.
Vizcarra, de 57 años, niega las acusaciones.
La jueza María de los Ángeles Álvarez dijo que no consideraba que Vizcarra estaba en peligro de fuga mientras las autoridades lo investigan.
Sin embargo, el fiscal German Juárez, quien pidió la prisión preventiva, presentó como pruebas registros de llamadas telefónicas que Vizcarra habría realizado a propietarios de las empresas que construyeron un hospital y una red de irrigación, así como delaciones de colaboradores.
El fiscal dijo que Vizcarra podría fugarse a Bolivia por su cercanía al mandatario Luis Arce, pero la jueza consideró que eso es un “dato ligado a la especulación”.
En febrero, Vizcarra fue el centro de un escándalo cuando reconoció que había recibido la vacuna contra el coronavirus de la Sinopharm de China en octubre, cuando aún era presidente y meses antes de que las vacunas estuvieran disponibles públicamente.
Los constantes escándalos de corrupción en Perú han plagado a cuatro expresidentes en las últimas dos décadas.
