“Memento mori, Duque. A todo Procusto le llega su Teseo, es decir, que a todo marrano gordo le llega su diciembre”. Esa fue la amenaza, usando la expresión en latín, lanzada al presidente de Colombia Iván Duque por el comandante de la disidencia “Nueva Marquetalia”, Seuxis Paucias Hernández, alias “Jesús Santrich”, en un video presuntamente grabado en territorio venezolano el pasado 13 de febrero.
Esta y otra supuesta amenaza contra Duque que indica "recuerda que morirás”, generaron el rechazo unánime, tanto del gobierno, como de la oposición en Colombia.
Desde su cuenta de Twitter y utilizando también frases en latín el ministro de Defensa, Diego Molano, le anunció a Santrich que el presidente Iván Duque se pronuncia con “hechos, no con palabras”.
El Consejero Presidencial para la Estabilización y la Consolidación, Emilio Archila, indicó que “al contrario, el que debe estar atemorizado es él (Santrich) de que las autoridades lo estén buscando y que las autoridades lo van a atrapar en cualquier parte del país o del extranjero, siguiendo los protocolos y los lineamientos legales que corresponda”.
Entre tanto, el analista internacional y asesor en temas de defensa, John Marulanda, señaló que las amenazas de Santrich se unen a los insultos proferidos, en los últimos días, por el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino contra Duque, y dejó entrever que sería una estrategia de provocación hacia Colombia orquestada desde el vecino país, por el gobierno de Nicolás Maduro.
“Pareciera que hubiera una estrategia acordada para provocar algún tipo de reacción, alguna manifestación, algo que pueda generar algún nivel de incidente entre los países” y agregó que “hay ahí una trama, no sería nada raro que esté hecha desde Venezuela, planeada desde Cuba y la están ejecutando con esos insultos directos, por el ministro, el general Padrino y el narcoterrorista Santrich. Seguramente vendrán más”.
Marulanda señaló que Santrich solo corrobora sus intenciones criminales y “está haciendo quedar muy mal a quienes lo defendieron y trataron de darle impunidad, a toda esa gente que dijo que el Gobierno estaba actuando mal con un hombre honrado, ahí están las pruebas de que sigue siendo un narcoterrorista”, aseguró.
Por su parte, el senador Roy Barreras, exnegociador del acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), quien actualmente encabeza un movimiento que busca revocar el mandato de Iván Duque, rechazó la amenaza que calificó como “una estupidez política” y expresó su solidaridad con el mandatario colombiano.
Históricamente las FARC mantuvieron como objetivo militar a los presidentes en Colombia. Durante la posesión de Álvaro Uribe, en 2002, milicianos de ese grupo guerrillero lanzaron artefactos explosivos de bajo poder contra la Casa de Nariño y recientemente el excomandante de la extinta guerrilla, Rodrigo Londoño, reconoció que mientras se exploraban las condiciones para un eventual proceso de paz, las FARC planearon un atentado contra el expresidente Juan Manuel Santos que nunca se realizó.