La desaceleración generalizada de la economía mundial afectará solo parcialmente a América Latina porque varios de los mayores países de la región están protegidos gracias a sus políticas monetarias, según el Banco Mundial (BM).
En un informe semestral sobre la economía en el hemisferio, el BM indicó que ajustes al tipo de cambio adoptados en meses recientes han tenido un efecto positivo a causa de la desdolarización y políticas monetarias más creíbles.
Entre los países que ahora tendrían por esa razón un “sistema inmunológico” financiero más provechoso, el informe destaca a Brasil, Chile, Colombia, México y Perú, que juntos representan más del 70 por ciento de la población y el Producto Interno Bruto de la región.
Sin embargo, un número significativo de países de Centroamérica y el Caribe, indicó, no podrán absorber impactos externos porque sus economías son muy pequeñas y abiertas y no han podido aplicar “políticas monetarias basadas en metas de inflación y flexibilidad de cambio".
De acuerdo con Augusto de la Torre, economista jefe del BM para América Latina y el Caribe, Venezuela es un caso aparte “porque tiene verdaderos problemas macroeconómicos de fondo, un desajuste fiscal importante de mucha data, una expansión monetaria grande y una inflación alta".
El experto dijo que "América Latina ha construido un sistema inmunológico macroeconómico financiero mucho más robusto que el que teníamos en los años noventa. Se han ido eliminando o reduciendo las razones por las que teníamos miedo a la depreciación cambiaria". Con todo, el Fondo Monetario Internacional, por su parte, redujo las expectativas de crecimiento regional este año a 2,7 por ciento.
Entre los factores externos importantes que hoy inciden sobre la economía en la región figuran la eventual reducción de las políticas de estímulo financiero en EE.UU., la ralentización del crecimiento de la economía china y el desplome de los precios de las materias primas.
En un informe semestral sobre la economía en el hemisferio, el BM indicó que ajustes al tipo de cambio adoptados en meses recientes han tenido un efecto positivo a causa de la desdolarización y políticas monetarias más creíbles.
Entre los países que ahora tendrían por esa razón un “sistema inmunológico” financiero más provechoso, el informe destaca a Brasil, Chile, Colombia, México y Perú, que juntos representan más del 70 por ciento de la población y el Producto Interno Bruto de la región.
Sin embargo, un número significativo de países de Centroamérica y el Caribe, indicó, no podrán absorber impactos externos porque sus economías son muy pequeñas y abiertas y no han podido aplicar “políticas monetarias basadas en metas de inflación y flexibilidad de cambio".
De acuerdo con Augusto de la Torre, economista jefe del BM para América Latina y el Caribe, Venezuela es un caso aparte “porque tiene verdaderos problemas macroeconómicos de fondo, un desajuste fiscal importante de mucha data, una expansión monetaria grande y una inflación alta".
El experto dijo que "América Latina ha construido un sistema inmunológico macroeconómico financiero mucho más robusto que el que teníamos en los años noventa. Se han ido eliminando o reduciendo las razones por las que teníamos miedo a la depreciación cambiaria". Con todo, el Fondo Monetario Internacional, por su parte, redujo las expectativas de crecimiento regional este año a 2,7 por ciento.
Entre los factores externos importantes que hoy inciden sobre la economía en la región figuran la eventual reducción de las políticas de estímulo financiero en EE.UU., la ralentización del crecimiento de la economía china y el desplome de los precios de las materias primas.