La empresa Amtrak asumió “completa responsabilidad” por el descarrilamiento del tren en Filadelfia en el que murieron ocho personas.
“De todo corazón lloramos por los que murieron. Su pérdida deja un vacío en sus familias y comunidades”, escribió el presidente y CEO de Amtrak, Joseph Boardman en una carta abierta.
“Amtrak asume completa responsabilidad y se disculpa profundamente por nuestro papel en este trágico evento”, agrega.
La carta coincide con la revelación por parte de investigadores de la Junta Nacional de la Seguridad en el Transporte (NTSB) que en el minuto final antes del descarrilamiento, el tren aceleró de 112 kilómetros por hora a 170 Kph al llegar a una curva donde se supone la velocidad debe ser de 80 Kph.
Hasta ahora no se sabe si el maquinista Brandon Bostian aceleró el tren manualmente.
Bostian se ha negado a hablar con la policía, pero aceptó ser entrevistado por la NTSB en los próximos días.