Unos cinco empleados de la policía de la ciudad de Nueva York fueron arrestados por conducir ebrios y por vigilancia ilegal.
Los incidentes, todos separados, se dieron al encontrarse fuera de servicio.
En Queens, los agentes Joseph King y Dennis Munge fueron acusados de conducir bajo efectos del alcohol, negarse a una prueba de alcoholemia y por intentar huir de la escena.
Curline Brown, quien se desempeña como asistente administrativa de la policía, fue arrestada en el barrio Bronx y acusada de posesión criminal de una sustancia controlada.
Dos empleados, Miguel Gómez y Denise Johnson fueron acusados de vigilancia ilegal.
Johnson, quien se desempeña como agente de tráfico, realizaba una vigilancia cuando su oficio no lo requiere y no posee el entrenamiento. Johnson fue acusada de obstaculizar la administración del gobierno y posesión de un arma de fuego.
Los incidentes, todos separados, se dieron al encontrarse fuera de servicio.
En Queens, los agentes Joseph King y Dennis Munge fueron acusados de conducir bajo efectos del alcohol, negarse a una prueba de alcoholemia y por intentar huir de la escena.
Curline Brown, quien se desempeña como asistente administrativa de la policía, fue arrestada en el barrio Bronx y acusada de posesión criminal de una sustancia controlada.
Dos empleados, Miguel Gómez y Denise Johnson fueron acusados de vigilancia ilegal.
Johnson, quien se desempeña como agente de tráfico, realizaba una vigilancia cuando su oficio no lo requiere y no posee el entrenamiento. Johnson fue acusada de obstaculizar la administración del gobierno y posesión de un arma de fuego.