Quince efectivos navales británicos se reunieron con sus familias tras casi dos semanas de detención en Irán.
Los catorces hombres y una mujer, arribaron hoy, jueves, al aeropuerto Heathrow de Londres, a bordo de un vuelo comercial procedente de Teherán.
De inmediato fueron llevados en helicóptero a una base militar al sur occidente de la ciudad para reunirse con sus familiares y con autoridades militares.
Cuando el avión que los traía desde Teherán aterrizó en suelo británico, el primer ministro Tony Blair dijo que la liberación se logró por medio de conversaciones y presión al mismo tiempo.
Blair enfatizó, sin embargo, que se han abierto nuevas e interesantes líneas de comunicación y que si Irán desea, puede tener una relación diferente con Gran Bretaña.