Por lo menos seis personas murieron, el martes, después que una masiva tormenta azotara un pequeño pueblo cerca de la frontera entre Estados Unidos y México.
Un tornado en la población de Eagle Pass, en el estado de Texas, unos 241 kilómetros al suroeste de San Antonio, dejó por lo menos cuatro personas muertas en una casa móvil que fue arrancada de su sitio por el viento y fue a parar en una escuela primaria cercana.
Decenas de personas quedaron heridas y varias casas fueron destruidas, así como también la planta de agua potable del pueblo.
La Guardia Nacional fue enviada a Eagle Pass para asistir en los esfuerzos de búsqueda y rescate. Cientos de personas están alojadas en refugios de emergencia.
Del otro lado de la frontera, en México, tres personas murieron y por lo menos 40 resultaron heridas cuando un tornado azotó la población de Piedras Negras.
Meteorólogos dicen que los tornados formaban parte de una masiva tormenta que dejó varios centímetros de nieve en Colorado y otras partes del occidente de Estados Unidos.