El presidente Bush acusó a algunos de los senadores estadounidenses de estar enfrascados en lo que calificó de “puro teatro político” en momentos en que el Congreso se prepara para llevar a cabo un voto de censura contra el secretario de Justicia, Alberto Gonzales.
Durante una conferencia de prensa, el lunes, en su hacienda de Crawford, Texas, Bush dijo que Gonzales no hizo nada indebido.
El mandatario aseguró que sigue confiando en el liderazgo de Alberto Gonzales en el Departamento de Justicia.
Gonzales disgustó a los legisladores durante las audiencias para investigar por qué fueron despedidos ocho fiscales federales.
Críticos dicen que el Departamento de Justicia los dejó cesantes por razones políticas.
El gobierno de Bush niega las acusaciones.
Durante su testimonio ante el Senado, Gonzales dijo reiteradamente que no recuerda aspectos importantes de esos despidos ni el papel que él desempeñó en ellos.
El domingo, el senador republicano Arlen Specter, de Pensilvania, cree, según dijo, que Gonzales debe renunciar antes que se lleve a cabo un voto de censura en su contra.