El presunto nominado presidencial del Partido Demócrata, Barack Obama,
decidió no usar financiamiento público, en su campaña para la elección general.
La decisión, anunciada este jueves, significa que el senador por
Illinois no aceptará más de 80 millones de dólares en fondos públicos.
Pero
Obama, quien recolectó montos importantes durante la elección primaria, puede
recaudar dinero privadamente, para la campaña presidencial.
En un comunicado, Obama dijo que no hacer uso de la opción de recibir
fondos públicos no fue una decisión fácil, pero que el sistema actual para
financiar los comicios presidenciales está "descompuesto", y afirmó que los
oponentes se han vuelto "maestros en jugar con este sistema descompuesto".
Obama dijo que la campaña del presunto nominado presidencial
republicano -el senador John McCain- y el Comité Nacional Republicano están
alimentados por contribuciones de cabilderos de Washington y comités de acción
de intereses especiales que no tienen límite en la cantidad de dinero que
pueden recaudar para avisos publicitarios no controlados por las campañas.