El Fondo Monetario Internacional aseguró que la crisis económica no impactará de manera tan gravemente a Latinoamérica.
Por eso, según la entidad, no se escuchará hablar de una gran crisis en esa región del continente.
Es más, habrá desaceleración del crecimiento económico, pero habrá crecimiento.
El subdirector del departamento de investigación del FMI, Charles Collyns aseguró que el próximo año Latinoamérica crecerá un 4.5 por ciento.
“Ellos han
podido fortalecer los presupuestos de su sector público significativamente. Eso
les da más espacio que en el pasado para permitir que los estabilizadores
automáticos entre en funcionamiento en el contexto de una desaceleración”, dijo
Collyns.
Collyns destacó que México es uno de los países más firmes de la región, pero sus autoridades tendrán que tomar medidas para superar la crisis con éxito.
“El crecimiento ciertamente ha disminuido, pero ellos también están conscientes de las tasas más altas de inflación en México. Necesitamos ver que éstas bajen y eso dará espacio para una acción de política monetaria si fuera preciso”, dijo.
En cuanto a Brasil, el funcionario del FMI dijo que la caída de valor del real, la divisa brasileña, acrecienta las presiones inflacionarias, pero el bajo crecimiento ayuda a contrarrestar ese efecto.
“Brasil, es también una economía grande y relativamente cerrada, por eso el principal efecto posiblemente será el impacto de la reducción del crecimiento económico antes que la desvalorización monetaria. Y eso podría permitirle al banco central cambiar su política anti-inflacionaria del último año”.