Neil Armstrong, el primero en pisar la Luna, es un hombre que se había caracterizado por su silencio y su poca simpatía por las cámaras. Sin embargo, durante una entrevistada concecida a un website de Australia, habló de las expectativas y temores que le produjeron la idea de viajar al satélite de la Tierra.
El ex astronauta admitió haber dudado de la operación y según la BBC, sólo un mes antes de despegar el Apolo 11, se dio cuenta de que tenía la confianza suficiente para descender a la superficie del satélite.
Momentos antes de emprender su viaje, había muchas cosas que desconocía sobre la órbita lunar y en su momento creyó tener 90% de posibilidades de volver sano y salvo a la Tierra. Sin embargo, ese no era el problema. Su gran temor estaba en el 50% de probabilidades que garantizaban el aterrizaje en la Luna en su primer intento.
Cuando estaba próximo a aterrizar, el computador de la nave le indicaba un lugar inapropiado para descender porque estaba al lado de un cráter. "No era un buen lugar en absoluto", recordó el ex astronauta. "Tomé el control manual y lo volé como un helicóptero en dirección oeste", confesó Armstrong.
Leugo de llevar el Apolo 11 a una zona sin tantas rocas, finalmente logró ser el primer hombre en pisar la Luna.
Armstrong dice que quienes no creen en el hecho, es porque les encanta crear conspiraciones que finalmente van a tener que desechar cuando alguien vuelva y levante la cámara que él dejó en la Luna.
El ex astronauta también lamentó los recortes en el programa especial de la Nasa que adelanta el gobierno de Barack Obama, argumentando que esta reducción limita las expectativas del país en el campo de la astronomía.
"Es triste que estemos llevando el programa en una dirección en la que reduzcamos la cantidad de motivación y estímulo que le da a los jóvenes" expresó.
La entrevista de Armstrong, se dio en el marco de la celebración del 125º aniversario de la institución que agrupa a los contadores de Australia, y sus declaraciones causaron gran sorpresa en el mundo.
Armstrong tuvo el honor de ser la primera persona en poner un pie sobre la superficie lunar. Su imagen pisando la Luna en 1969, transmitida en vivo y en directo llegó a millones de hogares.
El ex astronauta admitió haber dudado de la operación y según la BBC, sólo un mes antes de despegar el Apolo 11, se dio cuenta de que tenía la confianza suficiente para descender a la superficie del satélite.
Momentos antes de emprender su viaje, había muchas cosas que desconocía sobre la órbita lunar y en su momento creyó tener 90% de posibilidades de volver sano y salvo a la Tierra. Sin embargo, ese no era el problema. Su gran temor estaba en el 50% de probabilidades que garantizaban el aterrizaje en la Luna en su primer intento.
Cuando estaba próximo a aterrizar, el computador de la nave le indicaba un lugar inapropiado para descender porque estaba al lado de un cráter. "No era un buen lugar en absoluto", recordó el ex astronauta. "Tomé el control manual y lo volé como un helicóptero en dirección oeste", confesó Armstrong.
Leugo de llevar el Apolo 11 a una zona sin tantas rocas, finalmente logró ser el primer hombre en pisar la Luna.
Armstrong dice que quienes no creen en el hecho, es porque les encanta crear conspiraciones que finalmente van a tener que desechar cuando alguien vuelva y levante la cámara que él dejó en la Luna.
El ex astronauta también lamentó los recortes en el programa especial de la Nasa que adelanta el gobierno de Barack Obama, argumentando que esta reducción limita las expectativas del país en el campo de la astronomía.
"Es triste que estemos llevando el programa en una dirección en la que reduzcamos la cantidad de motivación y estímulo que le da a los jóvenes" expresó.
La entrevista de Armstrong, se dio en el marco de la celebración del 125º aniversario de la institución que agrupa a los contadores de Australia, y sus declaraciones causaron gran sorpresa en el mundo.
Armstrong tuvo el honor de ser la primera persona en poner un pie sobre la superficie lunar. Su imagen pisando la Luna en 1969, transmitida en vivo y en directo llegó a millones de hogares.