Timothy Robbins, jefe interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, ICE, y la División de Control y Operaciones de Deportación, ERO, llegó a Guatemala con 120 guatemaltecos deportados de Estados Unidos.
Robbins aseguró que trataría con autoridades migratorias temas relacionados a la migración irregular, especialmente de unidades y núcleos familiares porque las deportaciones de padres con sus hijos han incrementado.
Al bajar del avión con al menos 120 deportados y 76 unidades familiares, dijo: "Detrás de mí, ven los resultados de la cooperación entre los gobiernos de Guatemala y Estados Unidos. Trabajamos para deportar a ciudadanos de Guatemala de manera segura y legal".
Sobre las unidades familiares
Las familias que retornaron a Guatemala ya habían finalizado su proceso migratorio. Según datos del Instituto Guatemalteco de Migración, del 1 de enero al 16 de agosto de 2019, 67.365 guatemaltecos han sido deportados; 35.638 por vía aérea desde Estados Unidos.
Robbins indicó que en lo que va del año fiscal se han retornado cerca de 49.000 guatemaltecos y las cifras van en aumento.
El funcionario mencionó que muchas de las familias fueron engañadas por contrabandistas. Les aseguraban que si pagaban más dinero y llevaban a un menor iban a entrar fácilmente a Estados Unidos. Recalcó que eso no es verdad e hizo un llamado a la población en general para que ya no intenten migrar de forma irregular y que tomen en cuenta los riesgos en la ruta migratoria por los grupos criminales que se encargan de torturar, asesinar y secuestrar a migrantes.
Robbins compartió que cuando se trata de la deportación de menores de edad es difícil; por tanto trabajan duro para asegurarse de cuidarlos lo mejor que puedan. Informó que “Tratamos de minimizar el tiempo en custodia”, esto porque han deportado 50% más de unidades familiares a comparación del año pasado.
Las redadas
El jefe interino de ICE y ERO aseguró que el personal de ICE continuará con redadas en Estados Unidos, ya que ha dado buenos resultados. Uno de los objetivos es responsabilizar a patronos estadounidenses que contraten a trabajadores que están de forma irregular en el país.
No descartó que entre los 120 guatemaltecos deportados vinieran personas de Mississippi, uno de los estados en donde se realizó una masiva redada.