Un reciente estudio científico podría aclarar como las ballenas grises y otras criaturas del mar se están adaptando al cambio climático.
Un estudio describe como las ballenas grises están adaptando sus ciclos al calentamiento y enfriamiento del planeta. El informe también sugiere que algunos de los pescadores en la costa oeste tendrán que perseguir presas diferentes.
“Las ballenas grises se ajustan a la situación del cambio climático en curso”, dice Nick Pyenson, paleo biólogo curador de la colección de fósiles marinos en el Museo de Historia Natural del Smithsonian en Washington.
La famosa colección incluye un montón de criaturas que han sido extinguidas por los cambios ambientales. También incluye algunos de los registros fósiles de la ballena gris, especie que aun vive en el Océano Pacífico.
Pyenson y su asesor de doctorado de la Universidad de Berkeley empezaron a preguntarse cómo las ballenas grises habían sobrevivido a través de los ciclos de calentamiento y enfriamiento global previos en la historia del planeta.
“En los dos últimos millones de años, el hemisferio norte ha experimentado cambios drásticos con las capas de hielo que van hacia Chicago y Seattle. Debido a esto, se absorbe gran cantidad de agua que de otra forma se pone en el océano y el nivel del mar desciende dramáticamente”, explica Pyenson.
El científico indica que es histórico que el nivel del mar cambie periódicamente, lo que clausura grandes zonas de alimentación. Su teoría es que la ballena gris lidia con los malos tiempos migrando menos o cambiando sus fuentes alimenticias, o ambas cosas. Incluso hoy, hay un pequeño número de ballenas grises que permanecen en un lugar para poder comer pescado, mientras que la mayoría de su especie migran largas distancias.
“Creemos que el hecho de que hay ballenas que no migran indica una gama de conductas y lo que estos animales pueden hacer desde el punto de vista ecológico”, indica Pyenson.
El informe afirma que la adaptabilidad es una buena señal de cómo las ballenas pueden responder a futuros cambios climáticos. Añade sin embargo, que el actual ciclo de calentamiento global producido por el ser humano, se está desarrollando más rápido y más drásticamente que los episodios históricos examinados.