El presidente de EE.UU., Barack Obama, ordenó que las banderas nacionales ondeen a media asta en la Casa Blanca y en todos los edificios públicos, en honor a los tres policías fallecidos en Baton Rouge, Luisiana.
La medida también aplica para los puestos militares y bases navales hasta el próximo 22 de julio.
El mandatario también dio la misma orden, tras el atentado perpetrado en Niza, en el que un hombre arremetió con un camión contra el público asistente a las celebraciones del Día Nacional de Francia, causando la muerte de otras 84 personas.
El asesinato de los tres oficiales de policía se suma a la ocurrida en Dallas en medio de un incremento de las tensiones raciales en el país, tras la muerte dos semanas atrás de dos ciudadanos negros a manos de la policía, uno de ellos precisamente en la localidad de Baton Rouge.
