La reunión entre el presidente Barack Obama y los líderes republicanos de la Cámara de Representantes en la Casa Blanca, terminó con más preguntas que respuestas.
El líder de los republicanos, John Boehner, junto al resto de su comitiva, salió apresurado de la Casa Blanca, sin decir una sola palabra de las conversaciones sostenidas con el mandatario estadounidense.
Minutos más tarde, a su regreso al Capitolio, Eric Cantor, quien participó de las negociaciones con el presidente Obama fue cuestionado por la prensa y se limitó a decir que hay una "mejor actitud para negociar" y que se trató de un "diálogo positivo", sin dar más detalles.
Los republicanos presentaron un plan temporal para aumentar el límite de la deuda, la cual fue recibida con cautela por parte del presidente Barack Obama. El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo que Obama estaba "contento" por la oferta aunque esperaba "ver" lo que contiene. "Al menos, es alentadora".
La propuesta republicana propone elevar el techo de la deuda para las próximas seis semanas, tiempo que según ellos, puede ser utilizado para negociar un acuerdo más amplio sobre el presupuesto de la nación, el nivel de endeudamiento y los recortes en el gasto público.
La propuesta no abarcaría la reapertura inmediata del gobierno, paralizado parcialmente desde el martes pasado.
“Lo que queremos ofrecer al presidente es la capacidad de moverse”, añadió el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner al momento de presentar la propuesta republicana.
“Yo esperaría que el presidente vea esto como una oportunidad y un esfuerzo de buena fe de nuestra parte para encontrarnos a la mitad del camino de sus demandas, para poder iniciar las conversaciones”, agregó.
El líder de los republicanos, John Boehner, junto al resto de su comitiva, salió apresurado de la Casa Blanca, sin decir una sola palabra de las conversaciones sostenidas con el mandatario estadounidense.
Minutos más tarde, a su regreso al Capitolio, Eric Cantor, quien participó de las negociaciones con el presidente Obama fue cuestionado por la prensa y se limitó a decir que hay una "mejor actitud para negociar" y que se trató de un "diálogo positivo", sin dar más detalles.
Los republicanos presentaron un plan temporal para aumentar el límite de la deuda, la cual fue recibida con cautela por parte del presidente Barack Obama. El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo que Obama estaba "contento" por la oferta aunque esperaba "ver" lo que contiene. "Al menos, es alentadora".
La propuesta republicana propone elevar el techo de la deuda para las próximas seis semanas, tiempo que según ellos, puede ser utilizado para negociar un acuerdo más amplio sobre el presupuesto de la nación, el nivel de endeudamiento y los recortes en el gasto público.
La propuesta no abarcaría la reapertura inmediata del gobierno, paralizado parcialmente desde el martes pasado.
“Lo que queremos ofrecer al presidente es la capacidad de moverse”, añadió el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner al momento de presentar la propuesta republicana.
“Yo esperaría que el presidente vea esto como una oportunidad y un esfuerzo de buena fe de nuestra parte para encontrarnos a la mitad del camino de sus demandas, para poder iniciar las conversaciones”, agregó.