La sala Bataclan ha vuelto a sonar, y lo hizo gracias a Sting, que ofreció un concierto en el que se celebró la reapertura justo cuando se cumple un año del atentado en el que murieron 90 personas, el peor ataque terrorista registrado en Francia.
Sting empezó pidiendo un minuto de silencio antes de su concierto. "Esta noche debemos lograr dos cosas: primero, recordar a los que perdieron su vida en el ataque y después, celebrar la vida y la música en este lugar histórico".
Hace un año, mientras Eagles of Death Metal tocaban, unos yihadistas accedieron a la sala y dispararon contra la multitud.
En un asalto de más de dos horas, ejecutaron a varios rehenes, hasta que uno de ellos fue abatido a tiros y otros dos detonaron sus chalecos.
"Larga vida a Bataclan", dijo Sting en un concierto cuya recaudación irá a dos asociaciones que ayudan a las víctimas de estos atentados.
