El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunió este viernes por más de media hora con la presidenta Dilma Rousseff en el último día de su visita a Brasil que concluye su gira sudamericana.
Biden tuvo palabras de elogio para Rousseff “por la magia de lo que ha sucedido aquí (en Brasil)… en los últimos 15 años”, donde se ha demostrado que no es necesario tener que “elegir entre el desarrollo y la democracia” como parece ser el caso en otros países como en Egipto o Venezuela.
“Es posible tener una democracia y un desarrollo, del que todos se benefician”, dijo Biden. “Su presidenta lo está haciendo ahora y esa es la razón de que su increíble influencia vaya más allá de las fronteras de Brasil”.
En el encuentro realizado en el palacio presidencial de Planalto, en Brasilia, también estuvieron presentes los ministros brasileños de Relaciones Exteriores, Antonio Patriota; de Minas y Energía, Edison Lobao; y de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimental. También estuvo el embajador de Estados Unidos en Brasil, Tomas Shannon.
Biden se reunió posteriormente con el vicepresidente brasileño, Michel Temer, con quien almorzó antes de preparar su regreso a Estados Unidos.
Curiosamente, el programa divulgado por la embajada de Estados Unidos decía que el almuerzo sería el “Fryday” (día de las frituras), en lugar de Friday, que significa viernes, error que fue notado y destacado en los medios de comunicación brasileños.
El encuentro coincide con la invitación formal a Rousseff de visitar Estados Unidos el 23 de octubre anunciada por la Casa Blanca esta misma semana.
Brasil es el segundo socio comercial de Estados Unidos, solo después de China, y es una de las tres principales economías emergentes del mundo.
Biden tuvo palabras de elogio para Rousseff “por la magia de lo que ha sucedido aquí (en Brasil)… en los últimos 15 años”, donde se ha demostrado que no es necesario tener que “elegir entre el desarrollo y la democracia” como parece ser el caso en otros países como en Egipto o Venezuela.
“Es posible tener una democracia y un desarrollo, del que todos se benefician”, dijo Biden. “Su presidenta lo está haciendo ahora y esa es la razón de que su increíble influencia vaya más allá de las fronteras de Brasil”.
En el encuentro realizado en el palacio presidencial de Planalto, en Brasilia, también estuvieron presentes los ministros brasileños de Relaciones Exteriores, Antonio Patriota; de Minas y Energía, Edison Lobao; y de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimental. También estuvo el embajador de Estados Unidos en Brasil, Tomas Shannon.
Biden se reunió posteriormente con el vicepresidente brasileño, Michel Temer, con quien almorzó antes de preparar su regreso a Estados Unidos.
Curiosamente, el programa divulgado por la embajada de Estados Unidos decía que el almuerzo sería el “Fryday” (día de las frituras), en lugar de Friday, que significa viernes, error que fue notado y destacado en los medios de comunicación brasileños.
El encuentro coincide con la invitación formal a Rousseff de visitar Estados Unidos el 23 de octubre anunciada por la Casa Blanca esta misma semana.
Brasil es el segundo socio comercial de Estados Unidos, solo después de China, y es una de las tres principales economías emergentes del mundo.