Al final de la presente semana Brasil y Bolivia a través de sus empresas energéticas nacionales, la brasileña Petrobrás y la estatal boliviana YPFB firmarán un contrato adicional de importación de gas boliviano a Brasil, que según informa el diario Estado de São Paulo le dará una ganancia extra de, al menos, 1.200 millones de dólares a Bolivia hasta el año 2019.
Según el matutino paulista, el acuerdo confirma la llamada acta de Brasília, que los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Evo Morales firmaran en el año 2007.
A través de dicho acuerdo, Brasil acepta pagar más “por las fracciones líquidas” del gas boliviano, en referencia a los gases butano, propano y también gasolina natural.
Según consideran los analistas, para Petrobrás será muy difícil transferir a los consumidores el aumento de los costos de abastecimiento que enfrentará. Pero en particular la crítica está dirigida a que en la actualidad, Brasil enfrenta un sobreabastecimiento de gas natural, debido a una retracción en el consumo y porque Brasil ha comenzado a explotar nuevos campos productores de gas.
Al concluir las negociaciones en Santa Cruz de la Sierra, donde se definió el aumento de los pagos, Petrobrás no emitió ninguna comunicación sobre el resultado, que hace lugar al reclamo de Bolivia de que Brasil estaba pagando un precio inferior al que debía por un gas de mayor calidad. El asunto había sido tratado antes de las elecciones en Bolivia, por parte de los presidentes Lula da Silva y Evo Morales, en el Chapare, la región donde el mandatario boliviano tiene su mayor fuerza electoral.
El analista de petróleo del Banco do Brasil, Nelson Rodrigues de Mattos, dijo al diario Estado que Petrobrás considera que no existe base legal para el pago adicional y que la medida podría ser rechazada por el Tribunal de Cuentas de la Unión. Según el analista “fue una decisión política muy cuestionada, pero hoy hay que aceptarla”.
Mejor aún, el exceso de gas pone a Petrobás en la posición de bajar el precio al consumidor y no aumentarlo, por lo cual en la práctica tampoco existe la forma de diluir el precio en los consumidores, algo que la energética se comprometió a no hacer.
Según el diario Estado, para Bolivia la firma será una buena noticia dado que han bajado las ventas de gas a Brasil. Pero incluso, aunque el gasoducto Bolívia-Brasil puede transportar hasta 31 millones de metros cúbicos por día, este año en promedio Brasil sólo ha importado 22 millones y medio al día, casi el mínimo, sin embargo la claúsula "take or pay", algo así como “úselo o pague”, coloca a a Petrobrás en la obligación de pagar como mínimo 21 millones de metros cúbicos al día.